Carbures prevé regresar a los beneficios en 2015 e incrementar sus ventas en un 103%
- Pasaría de perder 9 millones en 2014 a ganar 12,8 millones este año
- La compañía mantiene su intención de salir a bolsa, pero lo retrasa a 2016
Carbures prevé regresar a los beneficios en 2015 tras las pérdidas registradas en 2014 por motivos "no recurrentes", después de alcanzar en el nuevo ejercicio un incremento del 103% en las ventas, hasta 118 millones de euros, según la presentación ante analistas realizada esta mañana por la empresa.
El incremento en las ventas provendrá del crecimiento orgánico de la compañía y de proyectos ya contratados, al tiempo que, de la cifra de 118 millones, el 61% corresponderá al sector de la automoción, gracias a los acuerdos con la empresa china Shengrui.
El beneficio bruto de explotación (Ebitda) pasará de un resultado negativo de 9 millones de euros en 2014 a otro positivo de 12,8 millones de euros en 2015, asegura Carbures.
Criterios conservadores
La empresa dice realizar estas previsiones conforme a "los criterios más conservadores" y después de tener en cuenta aspectos como el coste de 3 millones de euros de pasar del MAB al Mercado Continuo y de 4 millones de euros por los retrasos en los programas aeronáuticos.
Además, insiste en que la revisión realizada por la auditora PwC no tiene carácter vinculante y no le obliga a reformular sus cuentas. "Las discusiones se han centrado en los criterios de contabilidad y no en la existencia de transacciones", señala.
Tras la nueva expresión de las cuentas para atender las recomendaciones de la auditoria, Carbures inicia ahora la fase dos de su plan de negocio, centrada en el crecimiento orgánico, la diversificación, las sinergias y la consolidación de la actividad.
Salida a bolsa
Carbures ha decido retrasar su paso del MAB a la bolsa hasta que sea "una consecuencia natural del desarrollo de negocio", probablemente "a finales de este año o el próximo".
Su consejero delegado, José María Tarragó, ha reconocido que "quizá forzamos demasiado esa salida al (mercado) continuo como objetivo" en sí mismo, previsto para finales de 2014.
Tras este anuncio, la compañía se vio envuelta en una serie de dudas sobre sus cuentas que le llevaron a la suspensión de cotización y que se resolvieron la pasada semana tras el cierre de una auditoría que supuso la "reexpresión" de determinadas partidas.
Así, Carbures mantiene su intención de salir a bolsa porque este es el objetivo de cualquier empresa de "cierto tamaño", al tiempo que ha subrayado que "hay cosas que tienen que ser naturales y no forzadas".
Tarragó ha reconocido que esta preparación "acelerada" del grupo para su salida a bolsa le ha costado tres millones de euros, lo que lastrará las cuentas de 2014, aunque ha insistido en que "hoy tenemos una compañía muy preparada para lo que va a venir gracias a esa lección que hemos aprendido".