EEUU debe repensar sus controles sobre el ébola: director CDC
Por Lisa Maria Garza y Terry Wade
DALLAS (Reuters) - El caso de la enfermera de Dallas quecontrajo el ébola mientras atendía a un paciente moribundodemuestra que Estados Unidos debe repensar cómo enfrenta elcontrol de la infección ahora que el mortal virus comienza aextenderse más allá de África Occidental, dijo el lunes unimportante funcionario de ese país.
Thomas Frieden, director de los Centros para el Control y laPrevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC, por sussiglas en inglés), aseguró que las autoridades sanitarias sigueninvestigando cómo se infectó la enfermera mientras cuidaba delliberiano Thomas Eric Duncan en una sala de aislamiento en elTexas Health Presbyterian Hospital.
Duncan murió la semana pasada y la enfermera es la primerapersona que contrae el virus en territorio estadounidense,llevando la preocupación sobre la contención a nuevos máximos.
La enferma fue identificada por el canal de televisión localWFAA como Nina Pham, de 26 años.
Reuters verificó de forma independiente su identidad con unprofesor en la iglesia donde acude a orar su familia y revisandoinformación pública a partir de su dirección.
La familia quedó en estado de shock cuando supo que la jovense había infectado de ébola, afirmó Tom Ha, amigo cercano de lafamilia Pham y profesor de estudios bíblicos en la IglesiaCatólica Nuestra Señora de Fátima de Fort Worth.
"La madre estaba llorando, muy mal", dijo a Reuters.
ENFERMERA ESTÁ ESTABLE
La enfermera está ahora "clínicamente estable", dijoFrieden, y el CDC está controlando a más implicados en elcuidado de Duncan por si mostraran síntomas del virus.
"Debemos repensar cómo abordamos el control de la infecciónde ébola. Incluso una sola infección es inaceptable", comentóFrieden a los periodistas.
"El cuidado del ébola es duro. Estamos trabajando parahacerlo más seguro y fácil", añadió.
Frieden se disculpó también por sus declaraciones deldomingo, cuando se conoció la infección de la enfermera, quesugerían que ella era responsable por una ruptura de losprotocolos que la expusieron al virus.
Algunos expertos en salud criticaron que en sus comentariosno se refirió a las profundas lagunas en la preparación delpersonal hospitalario para enfrentarse al ébola.
"Pido disculpas si esa fue la impresión que dio", comentóFrieden, destacando que la agencia va a incrementar elconocimiento sobre el ébola en los hospitales del país y areforzar el entrenamiento del personal.
El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, teníaprevisto reunirse el lunes con altos funcionarios de su Gobiernopara discutir formas de asegurar que el sistema de salud estápreparado para atender a personas con el virus, informó la CasaBlanca.
POLÉMICO MATERIAL INCINERADO
Mientras, el máximo funcionario judicial del estado deLuisiana anunció la aprobación de una orden para evitar que laspertenencias personales de Duncan, que murió el miércoles, seanenterradas en un vertedero local, incluso después de haber sidoincineradas.
El fiscal general de Luisiana, Buddy Caldwell, dijo que elmaterial recogido de Duncan y del departamento de Dallas en quese alojaba fue enviado el viernes a Port Arthur, Texas, para serprocesado en el incinerador de Veolia Environmental Services.Los restos irían a parar luego a un vertedero de residuospeligrosos en Luisiana.
"Se desconocen muchas cosas en este punto y es absurdotransportar desechos de ébola potencialmente peligrosos a travésde los límites estatales", dijo Caldwell en un comunicado.
Según los protocolos del CDC, el virus no sobrevive en losmateriales que han sido incinerados.
El actual brote de ébola es el peor registrado y ha matado amás de 4.000 personas, en su mayoría en Liberia, Sierra Leona yGuinea. Duncan, un liberiano, se infectó en su país y desarrollóla enfermedad cuando estaba de visita en Estados Unidos.
La infección de la enfermera de Dallas es la segundaconocida fuera de África Occidental tras el comienzo del broteen marzo. Anteriormente, una enfermera española se contagiócuando trataba a un misionero que enfermó en Sierra Leona.
Funcionarios sanitarios dijeron que el perro de Pham, unKing Charles Spaniel de un año, sería cuidado mientras su amaestá en el hospital. Esta decisión contrasta con el perro de laenfermera española, que fue sacrificado por temor a que pudieraexpandir la enfermedad, provocando protestas de los activistaspro derechos animales.