Isidoro Álvarez dejó el 20% del grupo El Corte Inglés a sus herederos

Isidoro Álvarez, el expresidente de El Corte Inglés, fallecido este domingo, deja a sus herederos entorno al 20% del capital de la compañía, según las fuentes consultadas por este periódico. Álvarez controlaba, no obstante, la mayoría de las acciones -alrededor de un 55%- ya que presidía el Patronato de la Fundación Ramón Areces, dueña de cerca de otro 35% del accionariado.

La cuestión está en saber ahora quiénes serán los herederos de Álvarez y si toda la participación pasa a manos de su familia directa, su mujer María José Guil y sus hijas Marta y Cristina Álvarez Guil, o si por el contrario ha cedido también una parte de la propiedad a la Fundación o incluso a su sobrino, Dimas Gimeno, que le sucede en la presidencia.

Hay que tener en cuenta, de hecho, que cuando en 1989 falleció Ramón Areces, cofundador de la empresa y presidente hasta entonces de la misma, traspasó todos los títulos a la Fundación. En un comunicado hecho público entonces, el gigante de los grandes almacenes explicaba: "El consejo de administración de El Corte Inglés, reunido el pasado 17 de agosto, ha sido informado por los albaceas del contenido del testamento de Ramón Areces, otorgado ( ... ) el 27 de octubre de 1976, por el cual instituye, como heredera universal de todos sus bienes, a la Fundación Ramón Areces".

El valor actual

Aquel legado elevó los recursos nominales de la fundación, sin ánimo de lucro, hasta 70.000 millones de pesetas (unos 420 millones de euros). Pero, ¿cuánto valdría hoy El Corte Inglés? Y, sobre todo, ¿a cuánto asciende la herencia de Isidoro Álvarez?

Al tratarse de una empresa privada resulta imposible saber el valor exacto. En 2007, el juzgado de lo Mercantil número 3 de Madrid obligó al grupo a adquirir la participación del 0,69% del capital social en manos de César Areces Fuentes por un importe de 98,5 millones de euros, con lo que si se estableciera una equivalencia el valor de la totalidad de los títulos de Isidoro Álvarez valdría 2.840 millones. Posteriormente se llegó a un acuerdo extrajudicial por el que el grupo pagó 50 millones de euros por ese paquete, valorándolo así en 1.450 millones.

No obstante, si se tuviera en cuenta que las 27 empresas más grandes del sector de la distribución en Europa cotizan de media con un PER -número de veces que el beneficio está recogido en el precio de la acción- de 17 veces y atendiendo al beneficio de 174,3 millones de euros registrado por El Corte Inglés en 2013, la empresa española arrojaría una capitalización si estuviera en bolsa de 2.955 millones de euros y la participación del 20% de Isidoro Álvarez valdría sólo 591 millones.

Esta cifra situaría a la española a la cola de las grandes empresas en el Viejo Continente. De hecho, el gigante español del comercio se situaría en la vigésimo cuarta posición de las 28 compañías más grandes del sector. Muy por debajo de otras firmas como Tesco, Metro, Carrefour o Inditex.

Además, esta cifra sería muy diferente si se mantuviera el beneficio récord que obtuvo en el año 2007, cuando sus ganancias netas ascendieron a 747 millones (su récord histórico). De hecho, de mantenerse esa cantidad, y según el mismo multiplicador de PER de 17 veces, su capitalización bursátil ascendería hasta 12.495 millones, estableciéndose así entre las siete firmas más grandes del sector en Europa.

Y es que no hay que olvidar que la apuesta de El Corte Inglés por el mercado nacional desde 2007 ha provocado que sus ganancias se hayan visto reducidas en un 75%. Una caída muy superior a la registrada por las 10 grandes firmas del sector, quienes con una mayor diversificación han reducido sus ganancias un 10%.