La crisis acaba con un mito: los cines Renoir cerrarán la mayoría de sus salas
- Altafilms, propiedad de Enrique González Macho, echa el cierre
Altafilms, la principal distribuidora española de cine de autor, propiedad del presidente de la Academia Española de Cine, se ha visto abocada al cierre por la crisis económica, la caída de espectadores, y la falta de una política audiovisual que ha terminado por ahogarla, anunció el jueves su dueño.
"Yo no quiero (que cierre) pero las circunstancias son las que son, llega un momento en que tienes que echar el freno porque si no te metes en un charco del que ya no hay quien salga", dijo Enrique González Macho en declaraciones a la Cadena Ser confirmando la noticia adelantada por El País.
Altafilms, fundada en 1969, se ha dedicado a la distribución, producción y exhibición de cine mayoritariamente europeo, sobre todo independiente, y ha traído a las pantallas españolas grandes éxitos como los recientes "Los chicos del coro" o "The artist".
"Me he dedicado al cine que a mi me interesaba y que ha interesado a miles de personas incluso a cientos de miles y me atrevería a decir millones. He tenido grandes fracasos pero también algunos éxitos. He dado a conocer a mucha gente, tanto extranjera como española y creo que eso ha sido mi patrimonio cultural", dijo.
González Macho achacó también el cierre de su empresa a la inexistencia de una normativa audiovisual única que fomente películas independientes, ya que en su opinión las televisiones privadas sólo financian el cine comercial estadounidense.
Cierre de cines Renoir
González Macho también confirmó el cierre de algunos de sus cines como algunos de los Renoir, donde se exhibe el material en versión original. En concreto, los Renoir se enfrentan al cierre de algunas de sus salas en Barcelona, Guadalajara y Tenerife, después de haberlo hecho ya en los últimos tiempos en Palma de Mallorca, Bilbao, Zaragoza y Cuenca.
La intención de González Macho es que sigan abiertos "por el momento, aunque ya se verá" las salas de los cines Princesa, Renoir Plaza de España y Renoir Retiro, todos ellos en la ciudad Madrid. Además, también continuarán en funcionamiento los cines Renoir Floridablanca de Barcelona, Renoir Guadalajara, Roxy de Madrid y Renoir Tenerife. Se espera que solo queden unas 20 salas de las 200 que llegó a tener.
Ayer tuvieron lugar las últimas proyecciones en los Renoir de Majadahonda, a las que el propio González Macho reconoció no poder ir ante la tristeza por el cierre. "Han cerrado varios Renoir. Van a quedar en Madrid Renoir Plaza España, Princesa y pienso que Narváez. En Barcelona Floridablanca y poco más", declaró.
El cierre de Altafilms afecta a unos 39 trabajadores, que llevan una media de unos 20 años trabajando para González Macho. "Mi obsesión es que sea en las mejores condiciones posibles para todo el mundo. Ese es mi objetivo prioritario, como he hecho en los cines. He cerrado 14 cines, con la Seguridad Social al día; tributos al día; indemnizaciones, que son una mierda y lo digo como empresario pero pagadas" declaró.
Cierre de la empresa
González Macho achacó también el cierre de su empresa a la inexistencia de una normativa audiovisual única que fomente películas independientes, ya que en su opinión las televisiones privadas sólo financian el cine comercial estadounidense.
"Una de las cosas más duras que he tenido que hacer es anular los contratos de películas que iba a traer que estaban francamente bien, como la nueva película de los (hermanos) Cohen... Me encantaría que las trajera alguien, pero no seré yo desgraciadamente", dijo González Macho.
El cine es una más de las áreas que se han visto afectadas por la política de recortes del Gobierno, que ha subido el IVA al 21% en un sector preocupado por la reducción de las ayudas y el descenso en el número de rodajes.
El presidente de la Academia de Cine, que indicó que la subida del IVA había sido un factor más pero no el determinante en el cese de su actividad, dijo que existía el peligro de que el tipo de películas como las que él estrenaba pasaran desapercibidas para el espectador. "Sería si como en el museo sólo existiera pinturas de unos autores y unas épocas. Si tú no sabes que existe el resto, no lo echas de menos", dijo.