Mitad de las botellas de champaña en Estados Unidos no son auténticas
El centro aprovechó el segundo aniversario de la firma de un tratado bilateral entre EEUU y la Unión Europea (UE) -destinado a proteger las denominaciones de origen- para dar a conocer una encuesta que señala que la mayoría de los consumidores estadounidenses están en contra de etiquetas vinícolas falsas.
El acuerdo, firmado en marzo del 2006, prohíbe la utilización en EEUU de etiquetas con los nombres de 17 denominaciones de origen -como Champaña, Jerez u Oporto- a menos que los vinos procedan de aquellos lugares.
El acuerdo permitió que en enero de este año las autoridades belgas destruyeran en el puerto de Amberes un cargamento de 3.200 botellas de vino espumoso procedente de Estados Unidos y etiquetado como "champaña de California".
Según la encuesta, el 79 por ciento de los encuestados dijo que los consumidores necesitan mejor protección contra el etiquetado confuso de bebidas y alimentos. Además un 63 por ciento apoya leyes que prohíben los etiquetados falsos para proteger los nombres de regiones vinícolas de todo el mundo.
La encuesta se realizó entre el 8 y 18 de noviembre del 2007 mediante entrevistas a 654 consumidores de vino del país y tiene un margen de error del 3,9 por ciento.
La directora del Centro de Vinos de Origen, Shannon Hunt, aprovechó los resultados de la encuesta para declarar que muestra que "los consumidores estadounidenses rechazan cada vez más la práctica de etiquetado intencionalmente falso de algunos productores de vino estadounidenses".
Los productores estadounidenses también están empezando a proteger su nominaciones de origen. Por ejemplo, en California el condado de Sonoma puso en vigor una ley que protege el uso del nombre de la región, conocida entre los aficionados norteamericanos por la calidad de sus vinos.
En mayo del 2007, el valle Napa (California) se convirtió en la primera región vinícola de Estados Unidos que recibió la denominación de origen por parte de la Unión Europea. EFECOM
crd/mla/jma