Empresas y finanzas

Plácido Arango Jr. El señor de los restaurantes

    Plácido Arango, el hijo del hombre que fundó el grupo Vips. Foto: Bloomberg


    Es hijo del hombre que fundó Vips, el imperio rojo de la hostelería. De él no sólo heredó el nombre, Plácido, y el apellido, Arango, sino también la presidencia del grupo, que su progenitor le cedió hace más de un año, en mayo de 2005.

    Consejero delegado del grupo desde 1997, debió de saber pronto que los negocios eran lo suyo: decidió estudiar Administración de Empresas en la Universidad de Tusts, en Boston, formación que completaría después en Tübingen, Alemania.

    A Arango no le gustan las fotos ni los eventos sociales. Uno de los pocos a los que ha asistido ha sido la entrega de premios de la Fundación Empresa y Sociedad, que concedió un galardón a la firma que preside. Guarda con celo su intimidad: no tiene ningún interés en que quienes no lo conocen sepan cómo es y no le entusiasma la idea de que escriban sobre su vida. Es un hombre discreto.

    Pero es difícil permanecer en el anonimato cuando se es el número uno de una empresa como la suya. ¿Cómo es de grande el Grupo Vips? Para hacerse una idea, piense que gestiona 290 establecimientos. Cuando vea un restaurante Vips, ése pertenece al grupo, claro. Y cuando vea un Ginos, la cadena de restaurantes de comida italiana, también. Si ha cenado en un The Wok, especializado en cocina asiática, ha cenado en el Grupo Vips. Si lo ha hecho en un local de la cadena Tío Pepe, también. Además, la compañía posee marcas internacionales como Friday's y Bice, y ocho restaurantes menos conocidos, entre los que están Teatriz, Iroco y El Bodegón. Y se puede decir que ha creado los conceptos oo (Mood y Root), lanzados recientemente.

    Desde que llegó la presidencia, Arango no ha parado: ha modernizado la empresa y la ha hecho crecer. Tras haber conseguido asociar su compañía con la cadena estadounidense de cafeterías Starbucks, el pasado lunes llegó la bomba: el banco de inversión norteamericano Goldman Sachs ha comprado el 30 por ciento del Grupo Vips, y quiere duplicar su tamaño y sus resultados. Arango dice que ha encontrado el socio ideal, que le ayudará a que la firma siga creciendo en España y en Francia, y quizás también en Portugal.

    Su gran interés por el arte y el diseño se refleja en los establecimientos de su empresa. A su gestión se debe que la imagen de Vips y la de Ginos hayan ido cambiando. Y que, en el restaurante Teatriz, la decoración sea una elemento fundamental, igual que en Root, donde la firma es de García de Vinuesa. La afición por el arte y la cultura le viene de familia: su padre fue presidente de la Fundación Príncipe de Asturias.

    Su paso por la compañía la ha consolidado como un icono de hostelería en España. Han pasado varias décadas desde que su padre, Plácido Arango, abriese los primeros restaurantes Vips en los años setenta. Entonces dio al grupo el nombre de Sigla. Hoy pasan por Vips unas 120.000 personas al día y el grupo prevé facturar 395 millones de euros este año.

    Se dice de Arango que es perfeccionista y un verdadero entusiasta de su trabajo. Disfruta con lo que hace, y eso se nota. Y, aunque seguramente le cuesta, trata de encontrar huecos en su agenda para otra de sus aficiones: la vela.