La Eurocámara rechaza el pacto de pesca con Marruecos
La decisión forzará a los pescadores de la UE a dejar las aguas de Marruecos y el Sáhara Occidental en unos días tras habérseles permitido operar en la zona a la espera de la aprobación formal del acuerdo por parte del Parlamento Europeo.
"La votación de hoy envía un mensaje fuerte de que el Parlamento no aceptará ningún acuerdo que ignore los derechos del pueblo del Sáhara Occidental y entre en conflicto con el derecho internacional", dijo el legislador de los Verdes españoles, Raúl Romeva, en un comunicado.
"Este acuerdo es una mancha vergonzosa para la política internacional de la UE y es momento de que sea consignado al pasado", añadió.
Sus críticos han cuestionado desde hace tiempo la sostenibilidad del acuerdo y si - como estipula la ONU - beneficia a la población saharaui que vive bajo la autoridad marroquí.
El legislador francés de centroderecha Alain Cadec describió como absurda la decisión del Parlamento al rechazar un acuerdo dos meses antes de que fuera a expirar, y dijo que la decisión minaría las conversaciones sobre un pacto pesquero a largo plazo con Marruecos.
"La Comisión Europea dijo el lunes que si no se adoptaba este acuerdo por el Parlamento, no habría un acuerdo futuro sobre pesca con Marruecos", dijo en un comunicado.
La comisaria de Pesca del bloque, Maria Damanaki, dijo que la Comisión respetaría la decisión del Parlamento, y propuso derogar la aprobación provisional de derechos de pesca en la región en una reunión de ministros de Pesca de la UE el jueves.
"No sabemos si un nuevo protocolo de pesca con Marruecos es posible", dijo en un comunicado. Si se acordara un nuevo pacto tendría que incluir más garantías sobre sostenibilidad medioambiental y legalidad internacional, añadió.
El año pasado, Damanaki dijo que la Comisión podría proponer una renovación solo si Marruecos demuestra que el acuerdo beneficia a los saharauis.
La anexión del Sáhara Occidental por parte de Marruecos en 1975 generó un levantamiento del Frente Polisario. La ONU medió un alto el fuego en 1991, pero las conversaciones posteriores no han logrado llegar a un acuerdo sobre el conflicto más prolongado en África.
La UE paga a Marruecos unos 36 millones de euros al año para permitir que sus pescadores faenen en sus aguas y en las del Sáhara Occidental en virtud de un acuerdo firmado en 2007. Las capturas son principalmente de sardinas y pulpo.