¿Cómo será el mundo más allá de 2020? El futuro es más incierto de lo que pensamos

Hacer planes a largo plazo resulta complicado en un contexto de incierto futuro económico. Prácticamente desconocemos en qué situación nos encontraremos dentro de un año, por lo que hacer el ejercicio de imaginarnos cómo será el mundo dentro de nueve o diez nos resulta casi impensable. ¿Tiene sentido pensar qué pasará después de 2020?

La empresa FutureWorld cree que puede ser un buen ejercicio empezarnos a plantear que ocurrirá. Sobre todo porque "el futuro nunca es urgente hasta que intrépidos líderes lo hacen serlo".

Esta compañía, que se define como un fondo de pensamiento sobre tecnología invita a los ciudadanos a plantearse el mundo más allá de 2020 a partir de una serie de llamativos escenarios. 

Su objetivo es generar un debate sobre cómo pueden impactar ciertos modos de hacer y actuar gracias al avance tecnológico en la empresa, el gobierno y la sociedad. Y a partir de ahí, empezar a organizarnos para lo que vendrá. Y es que, en su opinión, "muy pocas organizaciones se están preparando para un futuro radical".

En este sentido, el fundador y autor de FutureWorld, Wolfgang Grulke, asegura: "Vemos un mundo más allá de 2020 más competitivo que nunca. Es un mundo en el que correr riesgos es más seguro que hacer nada. El incrementalismo simplemente no lo cortará nunca más". Así pues, ¿qué nos espera?

1.- Se reinventan los servicios minoristas y profesionales

El 75% de toda la venta minorista se realizará a través de Internet. Los centros comerciales serán un entretenimiento para los ricos. Nace una nueva cultura regida por el "lo quiero ahora y lo quiero barato".

2.- "Esteroides digitales" en los negocios

Todo puede automatizarse. El 90% de los negocios, de los procesos empresariales, se realiza en línea y se audita en tiempo real. ¿Quién se encarga hoy de los servicios al cliente? Se han "externalizado" y están dirigidos por las personas que mejor lo conocen: los propios clientes. El viejo dicho de "el cliente es el rey" se ha hecho realidad.

3.- Todo el mundo está conectado - y es un derecho humano básico

En el mundo de la "abundancia digital", la idea de "tener" o "no tener" está desfasada, solo existe el "tener" y "no querer". La mayoría de gobiernos proporciona acceso a la banda ancha como un servicio básico. No hay razón para no formar parte de este mundo hiperconectado -a menos que se escoja deliberadamente no participar en él. 

4.- La tercera revolución de juventud

La edad y la experiencia ya no significa poder. Los adolescentes cometen los mayores delitos (la mayoría, electrónicos), libran guerras virtuales y gestionan las carteras de inversión más complejas. En este escenario,contratar a los mejores ya no es una estrategia viable. El trabajador ya no es el activo más importante de una empresa, lo son las relaciones. Los menores de 30 años pueden manejar veinte relaciones más que una persona mayor.

5.- Nada se olvida - todo puede encontrarse en buscadores

Todo lo que hacemos en los negocios y en nuestras vidas personales se almacena en la nube y está disponible en cualquier momento, lugar y dispositivo. Cada persona tendrá su propio ordenador personal y será el que use en su lugar de trabajo para desarrollar su labor.

6.- El tamaño no significa nada

Estar conectado lo es todo. Incluso las empresas más pequeñas tienen acceso a prácticamente una potencia informática ilimitada y sofisticado software, en la nube. Los nuevos competidores están poniendo las viejas industrias del revés.

7.- 100 será 60

Las industrias de biología y nanotecnología han revolucionado la atención sanitaria y la prevención de enfermedades. Los que vivirán 200 años ya han nacido. Ahora habría que hablar más allá de 500. El crecimiento de la población se limita a los países pobres. En cambio, en los países ricos, su ausencia se complementa con la inmigración. En este contexto surge una gran pregunta: ¿morirá antes de que se quede sin dinero?

8.- Más allá del "verde"

Las "guerras ecologistas" han polarizado el mundo. Solo el occidente, antes rico, aún tiene pasiones ecologistas, pero no puede permitirse las consecuencias.

El agua es el nuevo recurso escaso y la nueva oportunidad. La legislación da a cada producto un "índice de agua". El agua embotellada es ahora la conservación de lo ultra-insensible.

9.- Liderazgo desnudo

Los líderes han aprendido a luchar en un mundo abierto y transparente, más allá del lujo de las jerarquías y el control. Entienden el futuro y también el pasado. Conectan sus sueños e inspiran a los seguidores.

10.- Una sociedad verdaderamente abierta

Transparencia y apertura no son conceptos que afectan solamente a empresas o políticos. Se han trasladado a la sociedad e integrado en los negocios. FutureWorld lo llama "el mayor cambio de poder en la historia humana": un traspaso de poder de los gobiernos e instituciones hacia individuos conectados que se intercambian información a nivel global.

11.- Más allá del conocimiento

El conocimiento tendrá valor cero poque estará al alcance de todos desde su nacimiento. El conocimiento no será poder en un mundo en el que está a manos de cualquier persona. Lo verdaderamente importante será convertirlo en inteligencia y creatividad.

12.- Más competencia que nunca

Los mercados son dinámicos y caóticos y más competitivos que nunca. Para convertirse en ganadores hay que encontrar un espacio en blanco de oportunidades, donde no haya competidores.