El FMI avisa de riesgos considerables para la economía española
En el comunicado final de una delegación en el país, el FMI dijo que a pesar de las medidas emprendidas por el Gobierno español en el último año, no debe bajar la guardia y relajarse en cuanto al ritmo de las reformas.
"Por ello, no debe descuidarse el ritmo de las reformas, entre ellas una mejora de la credibilidad de la consolidación fiscal y la culminación de la reestructuración del sector financiero".
España ha estado bajo lupa desde el comienzo de la crisis de deuda de la eurozona por la inquietud de que la cuarta economía del bloque pudiese seguir los pasos de Grecia, Irlanda y Portugal, países que han tenido que ser rescatados.
Una serie de reformas y medidas de austeridad han ayudado a despejar el temor, aunque el diferencial de la deuda española frente a la alemana sigue cerca de máximos históricos desde la introducción del euro al persistir el miedo por Grecia.
Los riesgos para las perspectivas de España significan que las reformas realizadas hasta la fecha, entre ellas en los sectores de empleo y pensiones, deben ser fortalecidas, dijo el FMI.
El Fondo calificó de "alcanzable" el objetivo del Gobierno de reducir el déficit público español al 6 por ciento del Producto Interior Bruto (PIB) en 2011, aunque dijo que si los riesgos a corto plazo se materializan podrían ser necesarias medidas adicionales.
Los objetivos a medio plazo son también apropiados, pero según las previsiones más pesimistas de la misión se requerían medidas fiscales adicionales que representaran cerca del 2 por ciento del PIB hasta 2014.
El riesgo principal para España a corto plazo es la posibilidad de un nuevo deterioro en las condiciones financieras en medio de una crisis de deuda en la zona euro, señaló.
A medio plazo, el riesgo principal es que se prolongue la recuperación económica y sobre todo la altísima tasa de desempleo, que el Fondo espera caiga sólo moderadamente en el medio plazo.
El FMI también dijo que la recuperación seguiría siendo impulsada por las exportaciones, con un crecimiento gradual hasta el ritmo del 1,5-2,0 por ciento a medio plazo.
"El ritmo moderado refleja la necesidad de relajar desequilibrios acumulados y las condiciones financieras todavía tensas que enfrenta la economía española", concluyó el Fondo.