Banco Base valora su negocio bancario en 4.600 millones
La conversión de las cajas de ahorros en bancos se enmarca en la aceleración de la reestructuración financiera que ha puesto en marcha el Gobierno español para reforzar la solvencia del sector y despejar incertidumbres sobre el sistema bancario, muy dañado por el estallido de la burbuja inmobiliaria.
Según indicaron en una nota al regulador bursátil a última hora del viernes, las cajas integrantes de esta fusión -CAM, Cajastur, Caja Extremadura y Caja Cantabria- someterán el 30 de marzo a sus asambleas generales el proyecto de segregación de los activos y pasivos del negocio bancario.
El accionariado quedará formado por un 40 por ciento de CAM, un 40 por ciento de Cajastur, un 11 por ciento de Caja de Extremadura y un 9 por ciento de Caja Cantabria.