Lula no intervendrá en la cotización del dólar en Brasil
Río de Janeiro, 21 ago (EFECOM).- El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, ratificó hoy que su gobierno no intervendrá en el mercado cambiario para influir en la cotización del dólar y que esta tarea corresponderá "al mercado".
"El gobierno no hará ninguna magia porque no hay magia. El mercado va a tratar de regular ese dólar. Puede estar en 2,12, 2,04, 1,90, 2,15, 1,85. No hay problema, un día va a parar", dijo Lula durante un discurso en la inauguración de una planta de biodiesel en el interior del estado de Sao Paulo.
El tipo de cambio en Brasil se ubica hoy en torno a 2,04 reales por dólar, después de haber tocado la semana pasada 2,12 en medio del peor momento de la más reciente crisis financiera internacional.
Lula afirmó que esa crisis es de Estados Unidos y "son ellos quienes tienen que resolverla".
"Algunos pretendieron vender la idea de que la crisis podía alcanzar a Brasil, pero nuestra economía es más sólida que en cualquier otro momento", argumentó el presidente.
El real brasileño mantiene una valorización cercana al 32 por ciento frente al dólar desde agosto de 2004.
En las últimas dos semanas, en medio de la turbulencias en los mercados financieros internacionales, la moneda brasileña ha perdido cerca del 10 por ciento frente al dólar y casi ha dejado en el camino la valorización que llevaba acumulada en 2007.
Pero a pesar de ese retroceso, el real mantiene todavía un alza cercana al cinco por ciento frente al dólar, comparado con la cotización de agosto de 2006 (2,13 reales), en medio de una estabilidad económica sin precedentes en los últimos años.
Lula destacó en su discurso que recibe presiones de exportadores e importadores para que intervenga cuando el dólar cae o sube, pero descartó esa posibilidad y recalcó que el tipo de cambio es libre y flotante.
Insistió en que Brasil está inmune a la crisis financiera internacional desatada por la quiebra del mercado de hipotecas de riesgo en Estados Unidos.
Atribuyó la crisis a quienes salieron a especular y se estrellaron "apostando en títulos de tercera categoría como si estuvieran apostando en un casino".
Brasil acumula hoy reservas internacionales por 160.000 millones de dólares, lo que le da un blindaje suficiente para enfrentar la crisis, según el gobierno.
"Aprovechamos la caída dólar y fuimos comprando nuestra duda en moneda extranjera, lo que nos dio tranquilidad, porque cuando vinculaban nuestra deuda al cambio éramos los peores del mundo", afirmó Lula.
"El dólar tosía y nosotros moríamos", dijo al ilustrar la extrema vulnerabilidad de la economía brasileña frente a turbulencias financieras similares a la de ahora.
Ratificó que mantendrá su política económica, calificada por expertos como "restrictiva y ortodoxa", concentrada en la lucha contra la inflación, en mantener el gasto público bajo control y dar prioridad al pago de intereses de deuda.
Por su parte, el ministro de Hacienda, Guido Mántega, dijo que la situación "está absolutamente bajo control", ratificó el discurso oficial e insistió en que la turbulencia "va a afectar muy poco a Brasil".
"No va a interrumpir el ciclo de crecimiento ya implementado ni va a traer inflación para Brasil, porque aunque haya una depreciación del real, ésta a va a ser muy pequeña", recalcó. EFECOM
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