Empresas y finanzas
El Banco de España pide a las cajas que culminen las fusiones
MADRID (Reuters) - El gobernador del Banco de España, Miguel Ángel Fernández Ordóñez, pidió el lunes a las cajas que culminen sus procesos de reestructuración para avanzar en la reducción de costes al tiempo que pidió al Gobierno mantener sus actuales políticas de reforma emprendidas para reactivar la economía.
"Las cajas que han recibido en préstamo recursos públicos deberán cumplir rápida y escrupulosamente los calendarios de integración acordados, porque de ellos se derivarán sinergias y procesos de reordenación de la capacidad que aliviarán las cuentas de resultados", dijo el gobernador.
En el actual escenario de caída de la actividad bancaria, 40 de las 45 cajas españolas se encuentran participando en algún proceso de integración. Sin embargo, desde el sector bancario se ha venido demandando recientemente una mayor velocidad para que se cerraran de forma efectiva los procesos de concentración.
En este escenario, Fernández Ordóñez insistió en que "todas las fusiones de cajas que ya están en marcha y todos los SIPs deberán tener constituidos los bancos que funcionen como organismo central del mismo y deberán hacer público su consejo y su nuevo equipo ejecutivo antes de Navidades".
En total, están en marcha 13 procesos de integración, de los cuales 8 han solicitado ayudas del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB), por 10.581 millones de euros.
Además, el gobernador también pidió a las entidades que no se ven implicadas en ningún proceso de fusión a actuar con rapidez para contrarrestar la contracción de los márgenes financieros, el encarecimiento de la financiación, el ajuste inmobiliario, los bajos tipos y una lenta recuperación que podrían dañar "el nivel y calidad de resultados".
"La actual presión sobre los resultados obliga imperiosamente a reducir costes, a aumentar la eficiencia y contrarrestar en la medida de lo posible la tendencia a la baja de los beneficios", agregó el gobernador del banco emisor en unas jornadas organizadas en Madrid por El País y Caja Madrid.
Ante las dificultades para financiarse en los mercados exteriores, las entidades españolas se han adentrado en una dura pugna por captar depósitos, con remuneraciones altas que en algunos casos están por encima del 4 por ciento, y que suponen una fuerte presión sobre la rentabilidad de las entidades.
A este respecto, el gobernador consideró "necesario que se recomponga el pasivo de las entidades, reduciendo su dependencia de este tipo de financiación".
Entretanto, Fernández Ordóñez veía clave que se afianzara la mejora en la confianza de los inversores que se había venido observando desde las pruebas de resistencia a la banca de julio pasado y que se tradujo en la capacidad de las entidades para retornar al mercado interbancario y de emisiones.
"Es cierto que los vencimientos de la deuda española se concentran en plazos medios y largos, pero las entidades deberán alargar las estructuras de vencimiento en la medida en la que los mercados lo permitan", explicó Fernández Ordóñez.
Por su parte, el consejero delegado de BBVA, Ángel Cano, estimó en 7.000 millones de euros el impacto adverso que en 2010 tendría la guerra de depósitos en los márgenes de intereses del conjunto del sector financiero español.
REACTIVACIÓN ECONÓMICA, CLAVE PARA BANCA
El principal responsable del Banco de España supeditó la reactivación del negocio bancario a la recuperación de la economía española.
Además, consideró que para la economía española el principal objetivo debía ser consolidar la recuperación y alcanzar de forma sostenible unas tasas de crecimiento que permitan volver a generar empleo.
"Si la denominada economía real no supera pronto sus propios desequilibrios, el bajo crecimiento, el desempleo y la morosidad podrían acabar afectando muy negativamente al sistema financiero y de esta forma impedirán que bancos y cajas pudieran ayudar a la recuperación económica", advirtió el gobernador del Banco de España.
Fernández Ordóñez consideró clave que el Gobierno mantenga la tensión y dirección de su reciente política económica, basada en la austeridad presupuestaria y las reformas estructurales y añadió: "El Parlamento debería apoyar las mismas a pesar de que la coyuntura actual haga más atractivo proponer aumentar los gastos, reducir los ingresos o retrasar las reformas".
Respecto a la situación de inestabilidad de los mercados surgida con la crisis de deuda reciente, centrada en torno a Irlanda, Fernández Ordóñez dijo que espera que la reacción de las autoridades irlandesas y las explicaciones de los ministros comunitarios sobre el mecanismo permanente de resolución de la crisis soberana contribuyan a calmar a los mercados.
Ordoñez señaló que, al parecer, los mercados no han entendido que una quita en la deuda soberana en manos de los inversores no entraría en vigor hasta el año 2013.
"Cabe esperar que una adecuada reacción por parte de las autoridades irlandesas así como la clarificación que han efectuado los ministros de Francia, Alemania, Reino Unidos, Italia y España, en el mercado de las reuniones del G20 en Seúl, sobre la naturaleza y alcance de los mecanismos de resolución de crisis de la UE, ayuden a calmar los mercados y a disipar inquietudes infundadas", agregó el gobernador.