Vicepresidente de Gazprom niega que su empresa chantajee a Europa



    Londres, 30 may (EFECOM).- El vicepresidente de Gazprom, Alexander Medvedev, niega hoy, en declaraciones al "Financial Times", que el grupo gasístico ruso haya intentado chantajear a sus vecinos europeos, como le acusado el vicepresidente de EE.UU., Dick Cheney.

    Cheney acusó a Gazprom de chantaje después de que el presidente de Gazporom, Alexei Miller, y el de Rusia, Vladimir Putin, dieran a entender que si Europa bloqueaba los planes de expansión de la compañía, tratarían de invertir en Asia y Estados Unidos.

    Medvedev se queja del tono crítico tanto de la prensa occidental como del vicepresidente de EE.UU. y dice que las acciones del grupo ruso tienen una motivación puramente comercial y en ningún caso política.

    Según el alto ejecutivo ruso, ha sido Ucrania, y no Rusia, quien ha intentado recurrir al chantaje para seguir recibiendo gas ruso a precio de saldo.

    "Intentamos llegar a una solución con Ucrania hasta finales del año pasado", explica Medvedev, quien añade que Ucrania se levantó "voluntariamente" de la mesa de negociaciones.

    "Tal vez creía poder chantajear no sólo a Gazprom, sino también a toda Europa, convirtiéndose así en el centro del universo", afirma.

    Por lo que se refiere a la supuesta amenaza formulada por el presidente de la compañía ante los embajadores de la Unión Europea, Medvedev explica que su inmediato superior sólo se refería al "destino de suministros futuros y no a los contratos existentes".

    Según algunos analistas del mercado citados por el periódico, Moscú intenta jugar con Europa y China, su cliente potencial más importante, enfrentándolos entre sí.

    Medvedev insiste, sin embargo, en que Gazprom tiene que tomar una decisión comercial sobre a dónde exportar los nuevos suministros de gas en las próximas décadas.

    "Si Europa nos dice que no quiere nuestro gas (...), entonces deberíamos invertir en el suministro a China", explica el empresario ruso.

    Gazprom ha instado además a Gazprom a abrir su enorme red de oleoductos a productores independientes y a otros países productores como Kazajistán o Turkmenistán, algo que Medvedev califica en tono sarcástico como "una idea puramente comunista, la del reparto equitativo".

    Asegura que en sus oleoductos no queda físicamente sitio para transportar el gas de terceras partes si la empresa quiere cumplir los compromisos ya contraídos.

    "Nuestro sistema está plenamente planificado y administrado no sólo de acuerdo con el estado actual de nuestra cartera de pedidos, sino también de cómo estará en veinte o veinticinco años", agrega.

    "Es evidente que no vamos a violar un contrato sólo porque al señor Cheney le gustaría que diésemos acceso a alguien de Asia central", dice Medvedev, que asegura: "Para nosotros, nuestros contratos son como la Biblia".

    Estados Unidos ha intentado hacer presión para que se construya un oleoducto alternativo capaz de transportar el gas de Kazajistán a través de Azerbaiyán hasta Turquía y Europa, sin pasar por Rusia.

    Según Mededev, se trata de un proyecto totalmente falto de realismo ya que ni Kazajistán tendría capacidad de producción suficiente ni Europa tampoco suficiente demanda como para que se justificase.

    Muchos de los clientes principales de Gazprom en Europa buscan la posibilidad de importar gas natural licuado desde el Norte de Africa mientras que otros confían en la construcción de una nueva generación de plantas nucleares. EFECOM

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