Air Comet responde a Fomento y recurre la cancelación de su licencia de vuelo
- Marsans la quiere recuperar para dar más valor al grupo
La compañía aérea interpuso en los Juzgados Centrales de lo Contencioso Administrativo de Madrid el pasado 5 de abril un recurso contra la decisión del Ministerio de Fomento de revocar la licencia de explotación, que es la que permitiría a la aerolínea, en el caso de tener nuevos dueños, retomar teóricamente las operaciones de vuelo.
Por vía administrativa, el grupo ha solicitado el mantenimiento de la licencia de vuelo desde mucho antes de su pérdida final, el pasado 15 de marzo. De hecho, el 5 de febrero de 2010 recibieron un escrito por el que se les comunicaba que se daba fin a la vía administrativa y que tenían hasta el 5 de abril para recurrir ante el contencioso administrativo, recurso que está a la espera de conocer el Juzgado.
El grupo turístico responde así al duro comunicado que el pasado lunes 12 de abril emitió el Ministerio de Fomento, en el que señalaba literalmente que Air Comet "ya no es titular de licencia alguna de explotación, no tiene ningún derecho de tráfico y no existe como compañía aérea".
Rápido proceso
Fuentes de la dirección del grupo Marsans explican a este periodico que no entienden la celeridad del Ministerio de Fomento en todo este proceso. "Si el 4 de abril teníamos todavía posibilidades por vía administrativa de recuperar la licencia de vuelo, ¿por qué hay tanta prisa por asignar los derechos de tráfico el pasado 23 de marzo?", añaden.
Desde el holding turístico tampoco entienden por qué no fueron invitados a esa asignación de derechos de tráfico y ni siquiera fueron informados de los resultados. La respuesta del Ministerio de Fomento es clara: la licencia de vuelo finalizó el 15 marzo y era un permiso temporal desde julio de 2009, cuando se decidió renovarla por un tiempo limitado ante las dificultades económicas que ha pasado el grupo turístico.
Air Comet ya ha pedido el concurso de acreedores y se espera que en pocos días se admita a trámite. A partir de ese momento, se establecerá un administrador concursal que velará por el proceso.
Expertos jurídicos consultados por elEconomista aseguran que los administradores concursales podrían dejar sin efecto tanto la cancelación de la licencia como la de los derechos de vuelo si se demuestra que ambas rescisiones merman el valor de los activos de Air Comet en el caso de una venta, según recogen los artículos 71 y 72 de la Ley Concursal. De hecho, en la negociación con Batallajuanola se está intentando que si se llega a un acuerdo de venta con Air Comet se supedite a que la aerolínea conserve la licencia de vuelo y los derechos de las rutas latinoamericanas.