Empresas y finanzas

Cortefiel entró en pérdidas en 2009: su deuda se disparó un 32,5%

  • Las entidades financieras exigen el 75% de su tesorería tras dispararse la deuda


La brusca caída del consumo pasa factura a las grandes cadenas de moda españolas. Primero fue Adolfo Domínguez, ahora Cortefiel: en su último ejercicio fiscal, cerrado el 28 de febrero de 2009, Cortefiel entró por primera vez en números rojos.

Con 112 tiendas más en todo el mundo, las ventas del grupo cayeron un 4% y su resultado neto arroja unas pérdidas de 7,57 millones, frente a un beneficio el año anterior de 33,2 millones. Pero no sólo es eso. De acuerdo con las cuentas consolidadas del grupo, que se acaban de depositar en el Registro Mercantil de Madrid, la deuda con las entidades de crédito se ha disparado un 32,57%, hasta 446,5 millones.

La empresa, propiedad de los fondos de capital riesgo CVC, PAI y Permira, asegura que al cierre del ejercicio se cumplían los ratios previstos en la financiación con la banca. No obstante, reconoce que "durante los primeros meses del ejercicio 2009/2010 se ha producido un empeoramiento de los niveles de consumo en los mercados en los que opera el grupo", por lo que según dice, pudiera llegar a producirse algún incumplimiento de los compromisos firmados.

Ante esta situación, el pasado mes de julio la empresa planteó a los bancos financiadores una reformulación del acuerdo, que éstos aceptaron en septiembre, pero cuyas condiciones se conocen ahora.

Las claves del plan

Con una deuda total de más de 940 millones -a 28 de febrero los compromisos financieros con la banca se elevaban a 438 millones-, el plan gira en torno a varios ejes. Las tres firmas de capital riesgo aportan 60 millones mediante una ampliación de capital, con la que éstas canjearán deuda por acciones por un valor total de 100 millones; se determinan unos nuevos compromisos a partir del próximo mes de agosto; se incrementa el coste de la financiación en cien puntos y se firma un compromiso para pagar hasta el 75% del exceso de tesorería.

Cortefiel tenía ya la obligación, como sociedad garante de los préstamos, de pagar hasta un máximo del 50% de la tesorería existente al cierre de cada ejercicio. Su problema es que el aumento del compromiso firmado ahora limitará su expansión y frenará sus planes de crecimiento.

No obstante, la empresa señala también que hay puntos positivos y reconoce que "la nueva situación patrimonial y de endeudamiento resultante de esta operación permitirá afrontar la difícil situación de los mercados y la economía en general, mitigando el riesgo de incumplimiento de los ratios financieros en el corto y medio plazo".

Planes truncados

Cuando en 2005, CVC, PAI y Permira adquirieron Cortefiel, apenas podían imaginarse la crisis tan brutal que iba a asolar España apenas tres años después. Pero lo cierto es que la recesión llegó, el consumo se está desplomando y todos sus planes se han ido al traste.

Los tres fondos anunciaron en diciembre de 2005 que su objetivo era duplicar el número de tiendas en un plazo de cinco años y superar los 2.000 establecimientos. Para eso queda ahora un año y, Cortefiel, al cierre del último ejercicio tenía sólo 1.156 locales abiertos. Y a eso hay que descontar además los 17 que le quedaban de Milano, cuyo cierre anunció en junio, y la venta de su filial alemana, que tenía otros 36 más.

Actualmente, la cadena más potente del grupo continúa siendo Springfield, con 500 tiendas, seguida de cerca por Cortefiel y Pedro del Hierro, que suman otras 324. Hace casi dos años, la compañía había anunciado que estaba negociando acuerdos con otros grupos, como El Corte Inglés en España, para poder abrir corners de esta última marca en sus grandes almacenes, algo que sin embargo no ha conseguido.