Empresas y finanzas

Legálitas: una empresa que populariza el Derecho



    Angel Alonso

    Madrid, 18 mar (EFECOM).- Juicios tengas...y los ganes, dice el mal de ojo de la gitanería como la prueba del nueve de que los lances y pleitos ante tribunales, al margen de los resultados, son una especie de maldición para cualquier ciudadano.

    España es un país que en los últimos años ha judicializado buena parte de su vida política y económica y el recurso a la vista judicial es una especie de mancha que se expande y amenaza con intervenir en todos los órdenes de la vida social. Es una de las exportaciones del modo de vida americano que ha hecho de la visita al juzgado toda una demostración de cotidianeidad.

    Sobre esa predicción, basada en lo rápido que calan en España los usos y costumbres sociales de los EEUU, y sobre el modelo de prevención sanitario que representan sociedades como Sanitas, trasladado en este caso al mundo del Derecho, un grupo de inversores individuales fundó en 1999 Legálitas, creando un nicho de mercado en el que la asesoría legal se hacía accesible a todas las capas de la población.

    Rafael Pola, miembro del consejo y accionista de Legálitas, explica que esta empresa "ha democratizado un derecho esencial del ciudadano, ya que por 88 euros al año tiene a su disposición un equipo de expertos abogados que le solventan cualquier duda sobre una consulta jurídica o legal".

    Legálitas puso en marcha su sistema de asesoría legal individualizada en 2003 y desde entonces ha atraído una masa de 180.000 socios, "que ya supera nuestra masa crítica para hablar de rentabilidad", aseguró el director general de esta empresa, Fernando Montenegro, que espera cerrar el actual ejercicio con un número de asociados próximo a los 250.000.

    De la seguridad que tienen los promotores en lo atinado de sus consejos y recomendaciones da muestra que el 90% de estos socios cada año renueva su contrato, pero resulta más contundente el hecho de que las consultas casi siempre devienen en acuerdos y evitan el último paso del trámite: el juicio, para apoyar el dicho profesional de la abogacía de que más vale un mal acuerdo que un buen pleito. Solo un 1,9% de las consultas derivan en el indeseado juicio.

    Para atender las peticiones de sus asociados, Legálitas cuenta con una plantilla de 360 trabajadores, de los que 124 son abogados, con una experiencia mínima en el ejercicio profesional de ocho años.

    Las consultas de los socios se tramitan telefónicamente durante las 24 horas del día y un hito que Legálitas ha celebrado recientemente como la ocasión lo merece ha sido la consulta un millón, desde Lisboa, de un cliente español, ya veterano de la compañía, teniendo como causa un accidente de carretera.

    Los clientes de Legálitas pueden adoptar también la forma de personas jurídica, en la modalidad de empresario autónomo o de razón social de una pyme. Para ellos hay productos de asesoramiento específicos y unas tarifas también muy aquilatadas que oscilan entre los 120 y los 240 euros anuales.

    Pola, el accionista, y Montenegro, el ejecutivo, han calificado la moderación tarifaria de Legálitas como la razón principal de su éxito y lo asumen con tal convencimiento que en los últimos tres años solo han aplicado una subida de los servicios por importe de 10 euros.

    Aparte de la asesoría legal individualizada, a los autónomos y a las pymes Legálitas oferta un producto destinado a los conductores, nacido al albur de la entrada en vigor del carné por puntos. Están también el Legálitas Arrendador que media en el siempre polémico mundo de los alquileres inmobiliarios y el servicio a comunidades de vecinos, cuyas tarifas evolucionan en función de su tamaño.

    En caso de que la consulta inicial tenga su capítulo final en el Juzgado, Legálitas aporta a su socio la defensa legal con unas minutas que se pactan en función de los honorarios que recomiendan los colegios regionales de abogados, pero que aún así pueden implicar ahorros para el cliente de hasta el 10% ó el 15%.

    Tras un millón de consultas, Fernando Montenegro cree que dispone del suficiente acervo como para teorizar sobre las inquietudes judiciales de los españoles. De este modo, la vivienda es la principal fuente de contenciosos, seguido de las prácticas relacionadas con el consumo, las relaciones con las Administraciones Públicas, las desavenencias familiares, la fiscalidad y las aseguradoras.

    El aspecto del negocio aflora cuando se anuncia que la facturación de Legálitas alcanzó el año pasado los 12 millones de euros y espera llegar este año a los 18-20 millones, una porción de crecimiento superior al 50%. Los beneficios revierten, casi todos, en inversiones. EFECOM

    aa/pam