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Fiscalía suiza pide hasta 28 meses de prisión para acusados quiebra Swissair



    Zúrich, 19 feb (EFECOM).- La Fiscalía suiza pidió hoy penas de prisión de entre 6 y 28 meses, así como multas de hasta 1,08 millones de francos (667.000 euros), para los acusados por la quiebra de la aerolínea suiza de bandera, Swissair.

    El acusado para el que se pide la mayor pena (28 meses de prisión y la máxima multa) es Mario Corti, quien fuera máximo responsable de AirGroup (matriz de Swissair) y tuvo mayor protagonismo público durante el proceso.

    El juicio comenzó el pasado 16 de enero con 19 ex altos cargos de la aerolínea sentados en el banquillo por estar acusados del hundimiento financiero de la aerolínea helvética y del mayor escándalo económico en la historia del país alpino.

    El proceso, que se desarrolla en la ciudad de Bülach (cercana a Zúrich), empezó después de que la Fiscalía dedicara cuatro años y medio de investigaciones para presentar la primera denuncia, en la primavera de 2006.

    Considerada una de las compañías más sólidas y de calidad del mundo, con 71 años de historia, la imagen de sus aviones en tierra el 2 de octubre de 2001 dio la vuelta al mundo y llegó a herir el orgullo nacional helvético, que tenía en la aerolínea su mejor embajadora en el extranjero.

    La decisión de suspender los vuelos ante la incapacidad de Swissair de responder a sus deudas costó al Estado helvético 3.000 millones de euros y guarda semejanzas con el reciente caso de AirMadrid, que la prensa helvética bautizó como "la Swissair española".

    Entre los acusados también se encuentran el ex presidente de Swissair Philippe Bruggisser y el de Crédit Suisse Lukas Mühlemann, así como el máximo accionista de la cementera Holcim y el segundo hombre más rico de Suiza, Thomas Schmidheiny, el ex ministro suizo Vreni Spoerry y el ex director de la polaca LOT, Jan Litwinski.

    La opinión publica suiza sigue con gran atención el proceso, ya que se implicó mucho en el escándalo y en su día arremetió contra los potentes bancos helvéticos y el Gobierno por no facilitar créditos que ayudaran a salvarla.

    La aerolínea se había visto afectada ya por la falta de integración de Suiza en el Espacio Económico Europeo (EEE) y el encarecimiento del queroseno, pero fueron los atentados del 11-S -con independencia de la gestión fraudulenta que pudiera haber habido de por medio- los que aportaron la gota que causó el derrumbe de Swissair. EFECOM

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