Empresas y finanzas

Toyota meta la directa con un aumento del 7,3 por ciento en sus beneficios



    Fernando A. Busca

    Tokio, 6 feb (EFECOM).- El gigante japonés Toyota metió la directa en el último trimestre de 2006 y aumentó su beneficio neto en un 7,3 por ciento, en su marcha imparable por superar próximamente a General Motors (GM) como el mayor productor mundial de vehículos.

    La marca nipona no sólo amenaza el reinado de la legendaria firma estadounidense como mayor productor de vehículos del mundo pues, además de vender muchos coches, las cuentas de Toyota indican que la empresa obtiene pingües beneficios, a diferencia que su competidora.

    Toyota informó hoy de que sus ingresos netos aumentaron un 15,2 por ciento durante los últimos tres meses de 2006, hasta alcanzar los 6,15 billones de yenes (unos 50.000 millones de dólares), un dato trimestral pero muy significativo del magnífico momento que atraviesa la empresa.

    La mayoría de los indicadores son positivos para la compañía nipona: aumenta las ventas en EEUU, Europa, Africa, Oceanía y Latinoamérica y, a pesar de vender menos vehículos en Japón, incrementa su cuota de mercado, hasta alcanzar el 47,5 por ciento.

    Otros reveses menores, como el descenso de ventas en los mercados asiáticos, sobre todo por el mal comportamiento de mercados como el indonesio y el taiwanés, no han logrado que la compañía modifique su previsión de vender 8.470.000 vehículos de todas las marcas del grupo durante el presente año fiscal, que termina en marzo.

    De alcanzarse estas ventas, Toyota tendría en el año fiscal 2006-07 unos ingresos de 23,2 billones de yenes (192.691 millones de dólares) y unos beneficios astronómicos de 1,55 billones de yenes (12.862 millones de dólares).

    Todo marcha viento en popa para Toyota e incluso la coyuntura económica internacional beneficia a la compañía en un mercado automovilístico que tiende a premiar la fórmula Toyota de bajos precios y bajo consumo de combustible.

    El segmento de los coches pequeños y de bajo consumo es uno de los que tendrá un mayor crecimiento, gracias al salto de enormes cantidades de población hacia la clase media en economías emergentes, como la China y la India, algo que estratégicamente debería beneficiar en el futuro a productores como Toyota.

    Pero en el presente Toyota marcha en volandas, sobre todo a causa del bajo precio del yen, que está contribuyendo a facilitar las exportaciones de la compañía, así como el del resto de las empresas japonesas.

    El yen bajo es un dato crucial para Toyota, ya que la compañía produce en Japón cinco de los nueve millones de vehículos que ensambla al año.

    De hecho, el yen barato ha mejorado las ventas de la compañía en la mayoría de los mercados del mundo, sobre todo en Europa y EEUU.

    En EEUU, el principal mercado de su rival GM, Toyota vendió entre octubre y diciembre 121.000 automóviles más que durante el mismo periodo del año anterior y alcanzó las 764.000 unidades vendidas. No obstante sus beneficios se redujeron, a causa de los costes generados por la creación de una nueva planta en Texas.

    Y en Europa, la empresa vendió 60.000 vehículos más hasta alcanzar los 306.000, sobre todo gracias al enorme tirón del Yaris, un vehículo pequeño y urbano, adaptado al estilo de vida europeo.

    A pesar de que Toyota anunció los resultados del periodo después de que cerrara la bolsa de Tokio, los mercados preveían ya un buen comportamiento del gigante automovilístico y empujaron hacia arriba sus activos un 1,79 por ciento, una tendencia positiva que siguieron todas las firmas del sector automovilístico en la bolsa japonesa.

    Todo son buenos resultados y buenas previsiones, pero además la empresa tiene un objetivo: convertirse en el máximo productor mundial de automóviles y desbancar a la legendaria firma General Motors que ,hasta hace poco, se creía invencible. EFECOM

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