Convulsiones en embarazo aumentan riesgo de parto prematuro
Menos del 1 por ciento de las mujeres padecen un trastornoque provoca convulsiones y epilepsia, señaló el equipo deldoctor Herng-Ching Lin, de Taipei Medical University.
La mayoría de ellas no tienen complicaciones del embarazo,pero sí un alto riesgo de que el bebé tenga problemas, como elparto de un feto muerto o malformaciones congénitos. Algunosantiepilépticos están asociados con esas complicaciones.
El equipo analizó si las convulsiones, o simplemente tenerepilepsia, eran factores de riesgo de nacimiento prematuro uotros efectos.
Para eso, usó la base de datos de Taiwan National HealthInsurance Research Data y las historias clínicas de 1.016mujeres con epilepsia que habían tenido un hijo entre el 2001 yel 2003, y las comparó con 8.128 mujeres sin epilepsia.
En total, 503 mujeres (49,5 por ciento) con epilepsiasufrieron convulsiones durante el embarazo.
Las tasas generales de partos de bebés con bajo peso alnacer (menos de 2.500 gramos) fueron del 6,3 por ciento en elgrupo de mujeres sin epilepsia, del 7,6 por ciento en el grupode mujeres con epilepsia que no tuvieron convulsiones duranteel embarazo y del 9 por ciento entre las mujeres epilépticasque sufrieron convulsiones.
Las tasas correspondientes para bebés prematuros (partoanterior a la semana 37 de gestación) fueron del 6,6 porciento, del 9,2 por ciento y del 10,5 por ciento. Las tasaspara bebés pequeños para la edad gestacional (peso al nacer enel 10 por ciento más bajo de la población) fueron del 16,6 porciento, del 17,9 por ciento y del 22,3 por ciento.
A diferencia del grupo control, y tras controlar losfactores sociodemográficos, esos tres indicadores fueronsignificativamente más altos entre las mujeres epilépticas quesufrieron convulsiones.
Y entre las mujeres epilépticas sin convulsiones durante elembarazo, sólo el parto prematuro se comparó significativamentecon el grupo de mujeres sin epilepsia.
"Se mantuvieron los mismos patrones de riesgos, aún cuandose tuvo en cuenta para el análisis el grupo de mujeres conepilepsia tratadas con fármacos antiepilépticos durante elembarazo", señaló el equipo.
Los autores destacaron que el control de las convulsionesdurante el embarazo debería ser un objetivo primario.
Concluyeron: "Los obstetras y los neurólogos deberíantrabajar juntos antes de la concepción y durante el embarazopara controlar de cerca las convulsiones y los factorescoadyuvantes (falta de sueño y adherencia al tratamiento)".
FUENTE: Archives of Neurology, agosto del 2009.