Empresas y finanzas

Deutsche Bank confirma que perdió 4.800 millones en el cuarto trimestre y prevé más dificultades

    Joseph Ackermann, presidente de Deutsche Bank. <i>Foto: Archivo</i>


    La entidad financiera alemana ha confirmado hoy las cifras que adelantó el pasado 14 de enero. Las pérdidas del banco en el último trimestre de 2008 se elevaron a 4.814 millones de euros, mientras que en el conjunto del año los números rojos de Deutsche Bank se situaron en 3.800 millones. Son sus primeros resultados negativos en 50 años y se deben, fundamentalmente, a su área de banca de inversiones.

    En concreto, esta división de negocio perdió 5.800 millones de euros entre octubre y diciembre del año pasado, según recoge Bloomberg.

    En cuanto a la cifra de negocio, esta alcanzó una volumen negativo de 885 millones, frente los 7.291 millones obtenidos en el cuarto trimestre de 2007, mientras que las provisiones por pérdidas crediticias crecieron un 80%, hasta 591 millones.

    Rebajar dividendo

    En el conjunto del año, Deutsche Bank (DBK.XE) registró pérdidas de 3.896 millones de euros, frente al beneficio neto de 6.510 millones del ejercicio precedente. El mayor banco de Alemania alcanzó una cifra de negocio en 2008 de 13.490 millones, un 56,1% menos, tras asumir 1.076 millones en pérdidas crediticias, un 76% más respecto al año anterior.

    Como primera medida, el consejo de la entidad se plantea una drástica reducción del dividendo hasta 0,50 euros, frente a los 4,50 euros abonados el año anterior.

    Tras la presentación de los resultados, el presidente de la entidad, Josef Ackermann, señaló que "de cara al futuro, seguimos viendo condiciones difíciles para la economía global", lo que en su opinión plantea "desafíos significativos para nuestros clientes y para el sector" de la banca.

    En su comunicado, el directivo reiteró que está "muy decepcionado con nuestros resultados del cuarto trimestre y la consiguiente pérdida neta en 2008", y añadió que , las condiciones de mercado "totalmente sin precedentes" han puesto de relieve la debilidad de su modelo de negocio.

    El mes pasado, Deutsche Post entrará en Deutsche Bank para que financie la compra del Postbank, lo que supuso la nacionalización indirecta de la entidad, ya que el Estado alemán es el mayor accionista de Deutsche Postbank. Hasta entonces,  Ackermann se había negado a aceptar la ayuda de los fondos de rescate públicos para el sector financiero.