La constructora de Florentino Pérez, la primera del sector en aterrizar en una eléctricamadrid. ¿Qué tiene en común el sector del ladrillo y el mundo energético? Si ésta cuestión hubiera sido planteada hace más de un año la respuesta sería casi nada. Hoy por hoy, la respuesta es: el ladrillo es el mandamás de la energía. Las principales constructoras españolas no paran de irrumpir en el capital de las mayores empresas energéticas del país. De hecho, el mercado vio ayer cómo esta historia se repite. El protagonista esta vez fue Sacyr Vallehermoso, que anunció la compra de más del 9 por ciento de Repsol YPF.ACS fue la primera constructora que inició esta historia, cuando el 23 de septiembre de 2005 anunciaba su asalto en Unión Fenosa. La constructora de Florentino Pérez adquirió el paquete accionarial que el Santander tenía en la eléctrica. Un paso que le permitió controlar de un solo golpe el 22 por ciento de Fenosa. La operación costó al ex presidente del Real Madrid más de 2.200 millones de euros y el objetivo se centraba en diversificar su actividad, convirtiéndose en un accionista de referencia en la tercera eléctrica española. ACS se quedó insatisfecha con tal compra y a los dos meses lanzó una oferta para comprar un 10 por ciento adicional de Fenosa. Un acto en el que ACS prometía fidelidad a largo plazo a la eléctrica española. Ahora, la constructora cuenta con el 35 por ciento de Fenosa y no descarta seguir elevando ese porcentaje.La segunda irrupción del ladrillo en el mundo energético vino de la mano de Acciona, al comprar el 10 por ciento de Endesa el 25 de septiembre de este año. Un segundo golpe que cambió el panorama de la guerra de opas que vive la primera eléctrica. Con esta operación, la empresa de la familia Entrecanales se ha coronado como la primera accionista de Endesa, y, además, esta dispuesta dispuesta a incrementar su participación. Eso si, será un movimiento en el que evitará lanzar una opa, por lo que esa participación deberá ser inferior al 25 por ciento, según establece la ley. Al igual que ACS, la intención de Acciona es continuar en el capital de Endesa y participar en su gestión. Dos días después de esta operación, el 27 de septiembre, ACS movía ficha en el sector eléctrico al anunciar la compra del 10 por ciento de Iberdrola. Una operación con objetivos parecidos a los dos casos anteriores, aunque con una peculiaridad. El fin último pasa por la fusión de Iberdrola y Unión Fenosa, gracias al vínculo del ladrillo que hay entre ambas empresas.Sólo trece meses ha necesitado el sector del ladrillo para merendarse en cuatro bocados el mundo energético. Ahora cabe preguntarse si se volverá a repetir la historia y cuándo. Parece que septiembre y octubre es la época de la invasión del ladrillo en el sector de energía.