'Agón!' es la nueva muestra que organizan 'laCaixa' y el British Museum y que estará hasta octubre en Madrid. Por V. BarahonaSi Niké, como dice la mitología griega, bajase al mundo de los mortales batiendo sus alas, descubriría que los humanos de hoy no distan tanto de los de la antigua Grecia. Vería que los niños siguen compitiendo, aunque hayan cambiado las tabas, dados de calcita o canicas de mármol por tabletas o consolas. Obsevaría que las competiciones deportivas siguen levantando pasiones, que las guerras entre estados siguen asolando vidas y territorios, y que, en el mundo del arte, la lucha de cineastas por alzarse con una estatuilla dorada, se puede asemejar a las competiciones entre dramaurgos que se organizaban en los festivales dionisíacos. La diosa Niké, personificación de la victoria, da la bienvenida -esculpida en mármol- a la nueva exposición que ayer viernes se inauguró en Caixaforum Madrid. Agón! La competición en la antigua Grecia. Así se ha denominado a una muestra -la segunda que nace como fruto del acuerdo de colaboración entre la Obra Social laCaixa y el British Museum- que, precisamente, y como dice su subtítulo, recorre todos aquellos ámbitos que quedaron empapados por el espíritu de la competición: los juegos infantiles, el deporte, el teatro y la música, y los conflictos bélicos. "El termino agón habla del carácter público de la competición, algo inherente al ser humano,", explicó la directora general adjunta de la Fundación Bancaria laCaixa, Elisa Durán, en la presentación a los medios. También apuntó Durán que, de las 172 obras presentes en la muestra -procedentes de las galerías o almacenes del British Museum-, solo una se ha podido ver anteriormente en nuestro país, y "muchas de ellas han sido restauradas para la ocasión". Es el caso de las esculturas del Mausoleo de Halicarnaso, considerado una de las siete maravillas del mundo antiguo, nunca antes cedidas por el British. El director del museo londinense, Hartwig Fischer, apuntó que "Europa hoy también es agón, pues se suceden tensiones y se vive cierta rivalidad fraternal". Lo dicho, Niké, poco hemos cambiado...