Este año, el parque de vehículos de renting podría terminar por encima del mítico medio millón de unidades, acercándose cada vez más a las cifras récord del sector (571.565 vehículos) marcadas en el año 2008. De hecho, en el primer trimestre se ha quedado a menos de 4.000 unidades (496.146), tras crecer un 9,57 por cientro respecto al mismo periodo de 2016. El empuje de las pymes, aunque también de particulares y autónomos, demuestra, en opinión de Agustín García, presidente de la AER, que el renting "va por el buen camino". La Asociación Española de Renting de Vehículos, fundada en 1995, agrupa a 23 asociados -entre los que se encuentran las principales compañías del sector-, que suman casi el 99 por ciento del mercado en España: ALD Automotive, Alphabet, Alquiber, APK Renting, Arval, Athlon Car Lease, Bansabadell Renting, Banco Santander, BBVA Autorenting, CaixaRenting, Enterprise Flex-e-Rent, Fraikin, Free2move Lease, Hyundai Renting, Ibercaja Renting, LeasePlan, Leasys, Northgate Renting Flexible, Overlease, Reflex Renting Flexible, Santander Consumer Renting, Toyota Renting y Volkswagen Renting. ¿Qué previsiones maneja de matriculaciones y flota para 2017? Nuestra intención es cerrar el año con un incremento de las matriculaciones superior al registrado por el total del mercado y seguir creciendo en flota, para acercarnos, poco a poco, a los parámetros precrisis, cuando se superaban los 570.000 vehículos. Se puede apuntar que este crecimiento, seguramente, nos llegue gracias a un incremento de los clientes profesionales autónomos, particulares y pymes, que continuarán aumentando su peso dentro del volumen de negocio del renting. En concreto, prevemos que las matriculaciones concluyan el año con una cifra superior a las 220.000 unidades en renting, un 7,5 por ciento más que en 2016. Por otro lado, el parque de vehículos en renting superará las 510.000 unidades, un 5 por ciento más que en 2016. La penetración del renting ya supone algo más del 17 por ciento de las compras totales en España. ¿A qué se debe este aumento año tras año? Se puedan apuntar causas exógenas y endógenas. Entre las primeras está el hecho de que se haya recuperado cierta armonía económica y política, lo que incentiva la inversión y, por otro lado, el renting está ampliando su base de clientes, inicialmente más centrada en la gran empresa. Las pequeñas y medianas empresas están abrazando también los beneficios que reporta este servicio, algo que abrirá también la puerta, definitivamente, a los autónomos y particulares. ¿Qué porcentaje considera que podría llegar a pesar el renting si estuviese maduro en el total de las matriculaciones? Como ya he dicho en anteriores ocasiones, el objetivo del sector es alcanzar en un plazo medio el 20 por ciento de las matriculaciones totales. A lograr esta meta nos ayudará el creciente cambio de la sociedad que, cada vez más, apuesta por el pago por uso en lugar de la propiedad. En los últimos meses, los vehículos comerciales han jugado un papel muy importante en las matriculaciones del renting. De hecho, hay tres o cuatro furgonetas cada mes entre los más vendidos. ¿Significa que las empresas están eligiendo para la flota más comercial el renting frente a la compra directa? Esa podría ser una lectura y otra interpretación, que me parece más acertada, es lo que comentábamos acerca del crecimiento de la pequeña y mediana empresa, que suele ser el principal demandante de este tipo de vehículos. Por otro lado, existe una estrecha correlación entre el renting y la actividad económica y el primer eslabón en el que se manifiesta la mejora de la economía es precisamente en la adquisición de vehículos comerciales. Si antes hacíamos referencia a la cuota que representaba el renting en el conjunto de toda clase de vehículos y que se situaba en el 17 por ciento a marzo y, en un plazo medio, esperábamos llegar al 20 por ciento, en el caso de esta clase de vehículos ya representamos el 20 por ciento, motivo que justifica que haya varios vehículos comerciales entre los más matriculados en renting. Ya no se habla de flota, sino de movilidad. ¿Podría explicar qué supone este cambio en las empresas del sector? Las necesidades de los clientes están cambiando, lo que obliga a las empresas de renting a anticiparse a ellas. En este sentido, ahora se demandan soluciones integrales de movilidad y muchas de las compañías de renting están adaptándose y abriendo su negocio para dar respuesta a estos nuevos requerimientos. En concreto, la movilidad para nuestros clientes es algo más amplio que tener un vehículo en renting a un plazo determinado, ahora se habla de renting flexible, car sharing, intermodalidad, etc.; todos estos servicios, que pueden ofrecer las compañías de renting, conforman el concepto de soluciones de movilidad. El otro gran paradigma es la flexibilidad. Sin embargo, muchas de las operadoras de renting tradicional también esgrimen la flexibilidad. ¿Vamos a un renting a la carta? Vamos a un renting cada vez más personalizado. Dado que las necesidades no son estándar, el renting tampoco puede serlo. Antes ya hemos apuntado que el renting amplía sus modalidades de servicios a fin de atender las demandas de movilidad de los clientes actuales y potenciales. Uno de los retos entre las pymes es el precio. Sin embargo, ¿sus datos dicen lo contrario? Siempre hemos dicho que aún hay que salvar una de las barreras comunicativas que más frena la expansión del renting entre las pymes, que es la idea preconcebida y errónea de que el renting es caro. En este sentido, el incremento de las matriculaciones entre este tipo de cliente indica que vamos por el buen camino, aunque hay que seguir reforzandose para que el coste no se compare con la simple adquisición, sino con el servicio completo. El precio, pues, no es obstáculo alguno para la pyme, siempre que se tengan en cuenta los servicios que incorpora y se compare adecuadamente con otras modalidades de uso y adquisición de vehículos. Si el renting es bueno para la gran empresa, donde está presente en el 80 por ciento de ellas, ¿cómo no va a ser bueno para la pyme? La pyme percibe que el renting es un servicio excelente, que les evita preocupaciones y les ofrece una amplia gama de soluciones. Por este motivo, piensan que debe ser caro y que no está a su alcance. En renting les puede resultar entre un 10 y un 15 por ciento más económico que otras fórmulas. Como apuntaron a final de año, los particulares y los autónomos fueron la sorpresa del año pasado. ¿Cree que sus asociados miran estos nichos con interés o es un mercado demasiado atomizado difícil de llegar? La mayoría lo ven con muchísimo interés y muchos han definido sus estrategias con el objetivo de captar a este tipo de clientes, porque el potencial de crecimiento es enorme. No nos olvidemos que el tejido empresarial principal de nuestro país lo constituyen las pymes y los autónomos. Parece cercana una de las demandas del sector, la desgravación del 50 por ciento en IRPF del coste del vehículo a los autónomos. ¿Podría suponer un acicate para el renting? Efectivamente, el pasado 18 de noviembre, el Grupo Parlamentario Ciudadanos presentó una Proposición de Ley en el Congreso encaminada a establecer una serie de reformas para los autónomos, entre las que se encontraba la deducibilidad al 50 por ciento del IRPF de los gastos relacionados con automóviles parcialmente afectos a una actividad económica. Sin duda, de aprobarse definitivamente, ayudaría a la implantación del renting entre los profesionales autónomos. Hay pendiente una reforma global de la fiscalidad en su conjunto. ¿Qué cambios pide el renting? ¿Qué nuevas exigencias tienen? El renting no es especialmente exigente con los cambios fiscales, pero por supuesto vamos a acoger gratamente cualquier tipo de iniciativa encaminada a incrementar los beneficios fiscales para sus clientes, unos beneficios que creemos que están sobradamente justificados si tenemos en cuenta los provechos sociales que reporta el renting, con un parque más joven, eficiente y seguro. El renting considera que el Impuesto Especial sobre Determinados Medios de Transporte, conocido coloquialmente como Impuesto de Matriculación, en tres años, desaparecerá, pues solamente del orden del 23 por ciento de los turismos y todoterrenos que se matricularon en España en 2016 estuvieron sujetos a este impuesto, que en el caso del renting se reduce al 17 por ciento. Año tras año, hay menos vehículos sometidos a este impuesto, toda vez que hay más automóviles que emiten menos de 120 g/km de CO2. Nuestra postura se centra en que si hay una reforma de la fiscalidad del automóvil no se compensen los ingresos que ahora reporta el Impuesto de Matriculación con otros tributos, pues reiteramos que, dentro de dos o tres años, se eliminará por la propia evolución tecnológica de los automóviles. Esto se apoya en los siguientes datos: en 2013 los vehículos matriculados sujetos al Impuesto de Matriculación se elevaban al 42 por ciento y en el caso del renting, al 33 por ciento. Observemos, pues, la reducción significativa que ha habido de vehículos gravados con este impuesto.