Economía admite que es una ley pensada para el mercado interno, no el europeomadrid. El Gobierno está por la labor de facilitar las cosas a los empresarios españoles que intentan frenar la toma de control de las eléctricas por parte de otras empresas europeas. Aunque no hay ninguna decisión tomada, en el Ministerio de Economía se "reflexiona" sobre la posibilidad de cambiar la actual normativa que limita el poder de quienes tienen participación en dos o más empresas líderes en un sector estratégico.El gabinete del ex ministro de Economía, Rodrigo Rato, aprobó una normativa sobre competencia que limitaba los derechos políticos de cualquier accionista que estuviera en dos de los operadores dominantes de sectores como el energético o las telecomunicaciones. Los derechos políticos en la junta de la segunda de esas sociedades no podían ser de más del 3 por ciento del capital, tuviese la participación que tuviese. Tanto el vicepresidente económico del Gobierno, Pedro Solbes, como el secretario de Estado de Economía, David Vegara, admitieron ayer que el tema estaba sobre la mesa, aunque todavía no se había abordado en el seno del Ministerio. Otras fuentes empresariales relacionadas con todas las operaciones en marcha en el sector energético aseguraban ayer que se trata de algo necesario para evitar la entrada masiva de capital extranjero en el sector y "así se lo hemos hecho llegar al Gobierno, que nos ha garantizado que lo va a estudiar".Antes de entrar a la Comisión de Economía de ayer, David Vegara explicó que esas limitaciones tienen su explicación lógica "en el marco de un sistema energético cerrado, porque responde a la necesidad de que los competidores compitan y no tomen participaciones cruzadas, creando grupos formal o informalmente únicos". El problema que desde el Gobierno se admite es que la realidad del sector energético ha cambiado, ya no es un mercado interno, y las operaciones en marcha demuestran que responde a un marco corporativo y empresarial que es más europeo que otra cosa.Pero el secretario de Estado quiso ser muy claro y advirtió que la norma sigue en vigor por el momento, algo a tener en cuenta ante la posibilidad de que Unión Fenosa e Iberdrola decidan una fusión amistosa. "Es un elemento de reflexión por el momento, pero no hay ninguna decisión tomada".Tarifas noDesde Economía se descarta también cualquier repercusión de las operaciones empresariales en el sector eléctrico sobre las tarifas que operan en el sector. "El Gobierno este año aprobó un aumento de las tarifas, anterior a los últimos acontecimientos, que todo el mundo entiende que es reflejo del mayor coste que tiene la energía para todos, porque en el año 2004 teníamos el petróleo a 25 dólares y ahora lo tenemos a 60, habiendo pasado por 78", explicó.El secretario de Estado advirtió incluso que, a pesar de las subidas aplicadas, todavía hay que reconocer que existe un déficit tarifario en el sector, algo que apunta a que seguirán al alza el año que viene.