La entidad tiene un 60% menos de beneficio por falta de extraordinariosBraulio Medel dejará la presidencia del banco de Unicaja antes del 30 de junio. A diferencia de su homólogo de Ibercaja, Amado Franco, Medel mantendrá su cargo de máximo responsable de la Fundación de la antigua caja malagueña, que ostenta 90 por ciento de las acciones de la entidad financiera. La nueva ley de cajas impide que a partir del 1 de julio se compatibilicen cargos en las fundaciones y los bancos que controlan. Con la decisión de Medel, sólo queda por despejar el futuro del presidente de La Caixa y Caixabank, Isidro Fainé, que tendrá que renunciar a uno de los dos puestos. El vicepresidente primero de Unicaja, Manuel Atencia, ha decidido mantenerse en el banco y renunciar a su cargo en la organización de carácter benéfico. La entidad andaluza hizo oficial este anuncio el día que publicó las cuentas de 2015. La falta de extraordinarios ha llevado a Unicaja a ganar un 60 por ciento menos con respecto a 2014. El resultado del grupo andaluz se situó en 186,6 millones. Un año antes, el banco se benefició del efecto positivo de 372 millones por la valoración respecto a los libros de DueroEspaña como consecuencia de su adquisición. En 2015, Unicaja no contó con este impacto, pero sí compensó esta ausencia de ingresos adicionales con una mayor operativa con deuda pública, principalmente. De esta manera, aumentó un 43 por ciento los resultados por operaciones financieras, hasta obtener 561,6 millones. La entidad explica que sin el efecto de la contabilización de EspañaDuero sus beneficios habrían crecido un 82 por ciento, a pesar del aumento de las provisiones para cubrir riesgos crediticios y de otros activos en casi un 10 por ciento. DueroEspaña, de la que tiene el 60 por ciento del capital, redujo significativamente las pérdidas, gracias, en su mayor parte, a las plusvalías obtenidas con la venta de deuda pública.