ACS, a través de su filial australiana Cimic y en consorcio con el fabricante de trenes CAF, se ha adjudicado el contrato de construcción y posterior explotación y mantenimiento del primer tramo del tranvía de Canberra, un proyecto estimado en 783 millones de dólares australianos (unos 508 millones de euros), según informaron las compañías. El grupo que preside Florentino Pérez refuerza su actividad en Australia, un mercado estratégico en la política de expansión internacional del grupo, en el que está presente a través de su filial Cimic, la antigua Leighton. De su lado, el fabricante ferroviario con sede en Beasain (Guipúzcoa) CAF se consolida en este mercado en el que hace unos años ya suministró trenes para el tranvía de Sidney, actualmente en circulación. El proyecto logrado ahora consiste en la construcción de un tramo de tranvía de 12 kilómetros de longitud que conectará el centro de la capital australiana con el distrito de Gungahlin, al norte de la ciudad.