La entidad sospecha que un préstamo de 400 millones fue a parar a esta actividadVolkswagen no para de recibir malas noticias. La que en otra época fuera la joya de la corona de la poderosa industria del automóvil en Alemania se ha convertido en una apestada para las instituciones financieras de la UE. El Banco Europeo de Inversiones anunció ayer que ha congelado cualquier préstamo al fabricante, tras reconocer que sus fondos podrían haberse visto envueltos en el escándalo de las emisiones fraudulentas. El presidente del BEI, el alemán Werner Hoyer, reconoció que “no podemos excluir” que existe una vinculación entre un préstamo de 400 millones de euros que realizó la institución en 2009 a la empresa alemana y los aparatos utilizados por la compañía para trucar las emisiones de sus vehículos diésel. Desde que el caso estallara en septiembre en EEUU, la situación para la compañía no ha parado de empeorar, afectando a un número creciente de sus vehículos e incluso a sus motores de gasolina. Más aún, el escándalo ha terminado por afectar también a sus principales responsables. Hoyer se mostró ante la prensa “muy preocupado” ante este panorama. Y por lo tanto, “para estar en terreno seguro, hemos decidido poner en suspenso cualquier nuevo préstamo a Volkswagen”, dijo el alemán. El fabricante de coches alemán recibió estos 400 millones de euros hace siete años precisamente para apoyar la I+D para desarrollar componentes de coches más eficientes y poderlos comercializar. Fue precisamente 2009 una de las fechas clave en el desarrollo y generalización de estos aparatos para trucar la medición de las emisiones, según ha reconocido la empresa. Volkswagen avisó que todos los modelos con motores diésel de 3.0 litros contenían este trucaje. Este préstamo fue parte de un paquete de 3.000 millones de euros desembolsados por el BEI para financiar proyectos de empresas automovilísticas, siendo gran parte de estos fondos para apoyar tecnologías ‘verdes’. Los 400 millones fueron devueltos en 2014 según marcaba el acuerdo con el banco europeo. En el último cuarto de siglo, Volkswagen ha recibido 4.600 millones de euros del BEI. El BEI ya avisó a los pocos días de que estallara el escándalo el pasado mes de septiembre sobre el riesgo de que el banco pudiera verse afectado por la tormenta del dieselgate. Por lo tanto, Hoyer señaló que la institución investigaría de una manera “muy exhaustiva” el asunto para ver hasta qué punto sus préstamos se habían visto involucrados. Hoyer compareció ante la prensa para presentar los resultados del plan de inversión europeo durante este primer medio año de vida. Según los datos del BEI, en el corazón del plan, la mitad de los 7.500 millones de euros facilitados apoyaron proyectos relacionados con la mitigación del cambio climático, las energías renovables y otras tecnologías verdes.