Este 2015 se iniciará la promoción de 45.000 viviendas, pero el principal impulso del sector llegará con la rehabilitaciónLa construcción empieza a remontar tras siete años de caídas consecutivas y este año crecerá un 3 por ciento, según las previsiones de Cesce, que asegura que este cambio positivo se reforzará en 2016. En este sentido, su informe apunta que el mayor crecimiento corresponderá a rehabilitación y mantenimiento, con un incremento del 3,9 por ciento, seguido de edificación no residencial, que crecerá un 3,2 por ciento, la edificación residencial, que se impulsará un 2,8 por ciento y la obra civil, que registrará un incremento del 1,8 por ciento. Según la sociedad, estas mejoras se materializarán con el inicio de la construcción de 45.000 viviendas este año, sin embargo, advierte de que en el corto plazo la crisis de producción se seguirá notando en ciertas zonas del país. Por otro lado, Cesce precisa que el valor de la producción en el sector de la construcción se sitúo en 2014 en 97.972 millones de euros, mientras que en 2015 la previsión es alcanzar los 100.900 millones de euros. De hecho, en los tres primeros meses del año se han creado 1.096 sociedades relacionadas con la construcción. Aumento de los visados El número de visados de dirección de obra alcanzó el año pasado los 58.776, lo que supone un incremento del 0,06 por ciento respecto a 2013. Este mínimo incremento representa el primer crecimiento que experimentan los visados, que registran caídas desde el año 2007. A pesar de ser una buena noticia para el sector, estas cifras se mantiene muy alejadas de los máximos que se registraron en 2006, cuando en pleno boom del sector inmobiliario llegaron a superar en un ejercicio completo los 911.000. Desde entonces, la caída acumulada supera el 93 por ciento. Igualmente, los datos de viviendas terminadas de construir en 2014 (46.795 unidades) contrastan enormemente con los registrados en 2007, cuando se finalizaron 641.419 inmuebles, un 93 por ciento más que el año pasado. La cifra de 2014 es un 28 por ciento inferior a la de 2013 y supone el mínimo de la serie histórica que comenzó en 2000. Respecto a la ocupación laboral, que ha perdido 1,75 millones de trabajadores en siete años, se situaba en 1,03 millones en 2014.