La brutal contención del gasto explica el saldo positivoLa brutal contención del gasto ha provocado que las finanzas helenas registren, en el cómputo global del primer semestre del año, un sorprendente superávit primario de más de 1.876 millones de euros. Así lo anunció ayer martes el Ministerio de Finanzas, a cargo desde hace dos semanas de Euclides Tsakalotos. Los Presupuestos griegos para 2015 estimaban que al término de junio el superávit quedaría lejano, pues estaban previstos unos números rojos de 1.235 millones de euros. En concreto, y según el desglose aportado por el citado ministerio, los ingresos del Estado griego asciendieron a casi 20.000 milones de euros, sin incluir a las administraciones locales. Son 1.665 millones de euros menos que lo estimado en las cuentas públicas, buena prueba de que Grecia se ha vuelto a ahondar en la recesión económica. Los gastos, por su parte, ascendieron a 23.242 millones de euros, 4.090 millones de euros menos de lo previsto en los presupuestos. Por último, el capítulo de inversiones públicas también registra un brusco descenso. En concreto, y a consecuencia de las dificultades financieras del Gobierno de Alexis Tsipras, la inversión se limitó a algo más de 1.154 millones, muy lejos de los 2.200 millones que pronosticaban las cuentas públicas. El Ministerio de Finanzas reconoció que "una vez la situación de liquidez helena se normalice, el gasto aumentará al nivel previsto". Es decir, Grecia volverá al déficit.