A lo largo de las últimas tres semanas la cotización de Indra consolidaba posiciones dentro de lo que tiene visos de haber sido una figura triangular, que es un patrón que generalmente es una pauta de continuidad de la tendencia previa, en este caso alcista. Por tanto, no nos sorprende lo que vimos el viernes, esto es la ruptura de resistencias en los 9,50 euros, algo que abre la puerta a un nuevo impulso al alza que muy probablemente lleve a su cotización a la zona de objetivo de los 10 euros. Operativamente, de un modo agresivo recomendamos comprar manejando una referencia de stop bajo 9,08.