Se acerca la primavera y con ella los comicios en la Universidad Complutense de Madrid, el campus presencial más grande de España. El actual rector, José Carrillo, dará el pistoletazo de salida el próximo 2 de marzo, día en el que firmará el decreto de convocatoria de elecciones para que la primera vuelta se celebre la última semana del mes de abril mientras que la segunda vuelta tendrá lugar en la primera de mayo. Entre sus rivales están Rafael Calduch (catedrático de Relaciones Internacionales), Federico Morán (exsecretario general de universidades), Dámaso López (antiguo decano de Filología) y Carlos Andradas (catedrático de Matemáticas y anterior vicerrector en la etapa de Carlos Berzosa). Los cinco candidatos participaron la semana pasada en su primer debate, organizado por la Plataforma de Investigadores de la UCM en el que se debatió sobre el futuro de las investigaciones en esta universidad. En este primer ring, todos se mostraron favorables a potenciar una "cultura de la investigación" y han reclamado mayor financiación y la creación de un plan estratégico. "Alejarse de la politización" Los candidatos también coinciden en que los comicios deben alejarse de la politización, pero una cosa es querer y otra es poder. Así, el actual rector estaría apoyado por Podemos, Morán apoyado por el Partido Popular y Calduch por UPyD. Por su parte, el PSOE en la Complutense dividiría su voto entre Carrillo, Andradas y Dámaso. En las elecciones de 2011, Carrillo contó con el apoyo de Comisiones Obreras, que se ha ido diluyendo en estos cuatro años. Carlos Andradas, por su parte, podría perder más puntos por su vinculación con Carlos Berzosa, anterior rector, y la deuda desorbitada que dejó. Al otro lado de la moneda, se encuentra Federico Morán, quien lleva meses preparando su campaña. Aunque es rechazado por los sindicatos, funcionarios y alumnos por haber emprendido medidas contra la universidad pública cuando era Secretario General de Universidades del Ministerio de Educación, cuenta con apoyos en el profesorado tanto de "derechas" como de "izquierdas". Su estrategia se está centrando en los doctores (51 por ciento), que tienen más peso que el resto de la comunidad educativa (estudiantes un 25 por ciento, personal docente e investigador un 12 por ciento y del de administración y servicios otro 12 por ciento). Carrillo ha pedido "rigor" a los candidatos aunque tampoco descarta que haya una campaña "sucia", como intuye cuando se le relaciona intencionadamente con Podemos o cuando se dice que la universidad está "politizada".