El presidente de la Fed y el secretario del Tesoro quieren disciplina: pueden permitirse que un gran banco caigamadrid. El presidente de la Reserva Federal, Ben S. Bernanke, y el secretario del Tesoro, Henry Paulson, lanzaron ayer un mensaje preocupante ante el Comité de Servicios Financieros. Ambos coincidieron en que "debe permitirse la caída de instituciones financieras" para promover la disciplina del mercado y la gestión del riesgo. El presidente del banco central de EEUU afirmó que el objetivo no consiste en mejorar la capacidad del sistema para resistir ante futuras crisis, sino también en mitigar el riesgo moral y el problema de entidades "demasiado grandes como para dejarlas caer", mediante la reducción del rango de circunstancias bajo las que se justifique la intervención gubernamental. En la misma línea se expresó el secretario del Tesoro, quien afirmó que "asegurar la estabilidad del sistema financiero es de lejos la principal prioridad", aunque advirtió de que, para que la disciplina sea efectiva, los partícipes "no deben esperar que los préstamos de la Fed o cualquier otra ayuda del Gobierno esten fácilmente disponibles". No obstante, el responsable del Tesoro estadounidense reconoció que la caída de algunas instituciones podría tener un "impacto sistémico", por lo que señaló que la semana pasada presentó una serie de propuestas para crear un proceso resolutorio que garantice que el sistema financiero pueda soportar la caída de grandes y complejas firmas financieras. En este sentido, Bernanke solicitó al Congreso nuevas herramientas que aseguren la liquidación ordenada de aquellas grandes firmas que estén al borde de la quiebra, así como el establecimiento de un proceso más formal para decidir cuándo utilizar dichas herramientas. En la misma línea, la Comisión Europea se está planteando endurecer las reglas para prevenir la existencia de nuevas crisis. Para ello, la intención del Ejecutivo comunitario pasa por que los bancos tengan que incrementar las provisiones cuando vendan productos de crédito, es decir, el corazón de la crisis actual. Estas reglas, además, no afectarán únicamente a los bancos europeos, sino que incluirán a las sucursales de los americanos. Cambios en Wachovia Wachovia ha nombrado a Robert Steel nuevo presidente ejecutivo, al tiempo que ha señalado que prevé unas pérdidas de 2.800 millones de dólares -más de 1.780 millones de euros- en el segundo trimestre.