La salida a bolsa se queda sin los dos grandes accionistas españoles de referencia Ni Ferrovial, ni Corporación Financiera Alba acudirán al tramo institucional de la OPV de Aena, tras quedarse fuera del núcleo duro al que inicialmente el gestor reservó un 21 por ciento del capital, según confirman fuentes de toda solvencia del mercado a elEconomista. Ferrovial ya mostró su descontento con la nueva valoración. El miércoles aún no había pedido títulos y su intención ese día era quedarse fuera de la operación. Así lo apuntaron fuentes de los bancos colocadores a este periódico. Estas mismas fuentes confirman ahora que finalmente la constructora no entrará en Aena, tras su intención inicial de adquirir un 6,5 por ciento. Por su parte, fuentes del holding de inversiones de la familia March reconocen que tampoco participarán en la OPV. La decisión debía tomarse ayer y la impresión el pasado jueves dentro de Alba ya era "más bien negativa", al considerarse que la operación era mucho "menos interesante". Estas fuentes adelantaron a este diario que ante la subida de la nueva horquilla de precios, situada ahora entre los 53 y los 58 euros, ya consideraban que su oferta (53,33) quedaría excluida. Fuentes de los bancos colocadores afirmaron el jueves a la agencia Bloomberg que, ante la elevada demanda, el precio mínimo al que se están aceptando ya las peticiones de inversores institucionales es de 55 euros. Es decir, que los precios en los que podría estar moviéndose ahora la OPV se sitúan en la parte alta de la horquilla, entre los 55 y los 58 euros, algo que no están dispuestos a asumir los accionistas de referencia del prevsito núcleo duro. Con esta renuncia, se rompe el esquema inicial que había diseñado el Gobierno, en el que el 21 por ciento del gestor de los aeropuertos españoles estaría en manos de un socio con experiencia en el sector (Ferrovial), un inversor español de referencia (Alba) y un inversor internacional de carácter más financiero (TCI). A falta de la confirmación oficial de TCI (que todavía no se ha pronunciado si va al tramo institucional) lo cierto es que no habrá núcleo duro en la salida a bolsa y una de las consecuencias es que ya no existirá una parte del accionariado con compromiso de permanencia de un año.