El Santander, además de anunciar el cambio en su política de dividendos y de la macroampliación de capital, también informó de las estimaciones de beneficio para el conjunto de 2014. Según el consenso, el banco podría ganar unos 5.800 millones de euros el año pasado, lo que supone un incremento del 30 por ciento con respecto al ejercicio anterior y un 40 por ciento si no se tiene en cuenta la fluctuación de las divisas. Sin embargo, el número dos del banco afirmó ayer que las cifras finales auditadas, que serán presentadas a principios de febrero, superarán estas estimaciones. El banco también comunicó que los ingresos aumentan en 2014 un 6 por ciento respecto a los del ejercicio precedente, impulsados por un margen de intereses que crece el 8 por ciento y las comisiones, con una subida del 6 por ciento. Respecto a las insolvencias, se reducen en torno a un 10 por ciento, donde destacan los casos de Brasil, España, Reino Unido y Portugal. Con ello el coste de financiación para el banco baja y ello posibilita que sus ratios de retorno de capital mejoren. El crédito presenta una evolución positiva, según lo comunicado por el banco, en la mayor parte de los mercados, mientras los depósitos permanecen estables. En España, según detalló Álvarez, la cartera crediticia experimentó un aumento del 3 por ciento en 2014, un porcentaje que espera que se duplique este año. También afirmó que mientras crecen las carteras de pymes y consumo, la única modalidad cuyo stock aún no aumenta es el hipotecario, a pesar de que los nuevos créditos se incrementan a ritmos superiores al 30 por ciento.