El saldo vivo cae en 64.802 millones, hasta los 734.482 millonesEl negocio hipotecario sigue cayendo a plomo a pesar de la reactivación en la venta de pisos. La deuda contraída por familias y empresas para financiar inmuebles ha menguado en 64.802 millones de euros o el equivalente al 8,1 por ciento en doce meses. En septiembre del pasado ejercicio la banca mantenía cerca de 800.000 millones prestados para tal finalidad, que un año después menguan a 734.482 millones, según datos de la Asociación Hipotecaria Española (AHE). La reactivación del crédito ha cogido gran velocidad en el producto hipotecario, al animarse la venta de pisos y casas. Las entidades facilitaron 18.892 millones a familias en los primeros nueve meses del año, lo que implica un aumento interanual del 18,88 por ciento. Sin embargo, la cifra sigue siendo insuficiente para compensar las amortizaciones de préstamos, muchos de ellos contratados durante el boom inmobiliario, cuando la facilidad de recursos excedió en mucho a lo que había sido habitual. En el ejercicio 2005 las familias recibieron 158.018 millones de fondos para financiar compras de viviendas; y aún cuando la crisis ya era una realidad, en 2009, las entidades otorgaron 73.154 millones en nuevas operaciones hipotecarias. Los problemas de la banca, de la economía y de los hogares retraen la contratación en los años sucesivos, hasta marcar un mínimo el pasado año en 21.853 millones. Durante 2014, la tendencia mejora, si bien los recursos movilizados son aún insuficientes para compensar el proceso de desapalancamiento. Los elevados y gravosos peajes de la morosidad se han traducido en productos más costosos y donde se exigen mayores avales, en garantía de que cualquier impago no volverá a dejar quebrantos. La tasa de insolvencias en hipotecas se situó en el 6,1 por ciento en junio, frente al 5 por ciento del año anterior.