Moody's anunció ayer una rebaja de tres escalones de la calificación crediticia de Banco Espírito Santo por la incertidumbre, hasta B3, dentro del nivel de bono basura en el que ya se encontraba. Además, indicó que podría reducir la nota en un futuro próximo. El movimiento es similar al que realizó el jueves el holding financiero del grupo (ESFG), que aglutina la participación del 25 por ciento en la entidad y las compañías aseguradoras. La decisión de Moody's no afectó a la cotización del banco al comunirse al cierre del mercado. La entidad volvió a cotizar después de informar al mercado de los riesgos con su principal accionista y tras haber permanecido suspendidabuena parte de la jornada del jueves por la caída del 17 por ciento. Tras reanudarse la negociación, los títulos experimentaron fuertes vaivenes. Finalmente, el banco cerró con un descenso del 5,5 por ciento, hasta los 0,481 euros. Y eso que ayer el regulador prohibió la operativa en corto sobre BES. En poco más de un mes pierde casi un 70 por ciento.