La alta dirección pasa de 11 a 5 personas, que junto al presidente y otras dos más integran el comité ejecutivoEl presidente de Campofrío, Pedro Ballvé, ha reducido a menos de la mitad la cúpula directiva de la compañía en vísperas de la opa lanzada por el grupo mexicano Sigma que, aliado con la china WH, se hará con el control de la cárnica. La alta dirección está integrada actualmente por 5 ejecutivos, frente a los 11 que había a 31 de diciembre de 2012. Se trata del consejero delegado, Fernando Valdés; el director financiero, Paulo Soares; la directora del área legal, Remedios Orrantia; el director de la cadena de suministro, Morten Jensen y el director de Marketing y Ventas, Jaime Lobera. Todos ellos integran el comité ejecutivo de la empresa, al que pertenecen también el presidente, que queda por encima de la alta dirección y cuyo cargo no se engloba en ella, y los directores regionales para el sur y el centro de Europa, Ignacio González y Bruno Keeris, respectivamente. Entre los directivos que han abandonado el año pasado el grupo destaca, especialmente, el antiguo consejero delegado, Robert Sharp, que había sido nombrado en representación de Smithfield Foods, el grupo norteamericano que tenía el 36,9 por ciento del capital y que fue adquirido por la china Shuanghui, la actual WH Group. Sharp abandonó la empresa el pasado mes de diciembre y el 2 de enero fue sustituido por Fernando Valdés. Los nuevos dueños de Campofrío han confirmado ya que su intención es la que de todo el comité ejecutivo de la compañía siga además al frente de la misma, dando así un respaldo claro a su gestión. Hoy, precisamente, acaba el plazo de aceptación de la opa. Sigma y WH Group controlan ya el 83,75 por ciento de la cárnica después de que la primera haya ido comprando pequeños paquetes en el mercado y de que la CNMV aprobara el pasado 21 de mayo la opa lanzada por la mexicana a 6,9 euros por acción el 23 de diciembre del año pasado. La oferta se dirige por lo tanto a tan sólo un 16,25 por ciento del capital. Sigma había lanzado una oferta anterior, el 14 de noviembre, diez céntimos más barata, a 6,8 euros. Lo hizo después de haber adquirido un 40 por ciento de las acciones en manos de la familia Ballvé, Oaktree y Caixabank, pero ante la resistencia a aceptar la propuesta por parte de los chinos tuvo que sentarse a negociar. WH seguirá ahora en el capital de la compañía.