Movistar, Orange y Vodafone reducen cuota en favor de Jazztel, Yoigo y los virtualesLa telefonía móvil tradicional sufre su particular travesía del desierto sin que se atisben indicios de mejora. Todo lo contrario. Las llamadas de voz y los mensajes cortos (SMS) han perdido el valor de tiempos pasados para convertirse en una rémora en las cuentas de los operadores. Según se desprende del informe trimestral de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), correspondiente al cuarto trimestre de 2013, los ingresos de la telefonía móvil se han desplomado interanualmente el 20,8 por ciento, con unas ventas de 1.751 millones entre los meses de octubre a diciembre del año pasado. La pujanza de la banda ancha móvil, con un repunte del 16,7 por ciento de un año para otro, permitió salvar los muebles de un sector que también deposita todas sus esperanzas en las comunicaciones integradas. La feroz competencia del mercado, con una espiral de precios a la baja alentada por todos los jugadores, se ha unido a los severos recortes regulatorios aplicados sobre el precio de terminación móvil en la segunda mitad de 2013. Todo ello castigó las cuentas de los operadores, sin olvidarse del efecto letal de WhatsApp y otras aplicaciones de mensajería gratuita sobre los SMS y las propias llamadas de voz. Los usuarios conversan por el móvil más que nunca, ya sea por voz o por datos, pero sin que esa conducta se traduzca en ingresos crecientes para las telecos. En telefonía fija todo son disgustos para los operadores, sin ninguna actividad que se salve de la quema: los ingresos por llamadas de fijo disminuyeron el 12,6 por ciento en el último trimestre de 2013 respecto al mismo periodo del año anterior, pero también han caído el negocio del acceso fijo a Internet (3,3 por ciento), las comunicaciones de empresa (con un descenso del 6,5 por ciento) así como el hundimiento de los servicios de información telefónica, cuyas ventas menguaron casi el 19 por ciento. La popularización del acceso a Internet a través de los móviles, conectividad que ya disfrutan 31,5 millones de españoles, invita a los usuarios a satisfacer sus consultas por medio de buscadores online antes que hacerlo a través de los números que empiezan por 118. Por todo lo anterior, no es extraño que los principales operadores españoles hayan disminuido sus ingresos respecto a los del cuarto trimestre de 2012: Telefónica de España los rebajó el 5,5 por ciento; Movistar, el 18,5 por ciento; Vodafone, el 12,9 por ciento; y Orange, el 2,1 por ciento. Por su parte, Ono congeló las ventas, con un repunte en el trimestre del 0,1 por ciento, mientras que Jazztel y Yoigo elevaron sus respectivas facturaciones el 18,1 por ciento y el 12,8 por ciento. Entre las tendencias más felices del sector sobresale el empaquetamiento de servicios de telecomunicaciones, que ya suman 5,9 millones, casi cinco veces más que las registradas en el mismo trimestre de 2012. También animan el sector los accesos de nueva generación, que permiten conexiones de muy alta velocidad. Estas conexiones ya alcanzan a 16,6 millones de potenciales usuarios, con un crecimiento interanual del 23,6 por ciento. Sólo la fibra óptica ya está canalizada en 6,2 millones de hogares, el doble que hace un año.