Alierta tampoco renunciará a su 50% en la operadora brasileñamadrid. Portugal Telecom (PT) no venderá a Telefónica su parte de la operadora brasileña Vivo, negocio que ambas comparten al 50 por ciento. Henrique Granadeiro, presidente de Portugal Telecom, se mostraba tajante ayer en unas declaraciones a la publicación brasileña Valor Económico y afirmaba que "si Telefónica me dice que quiere comprar (su mitad de la joint venture) yo respondo no, y punto", según Ep.Ambas compañías han dejado ver el interés por lograr el control total de Vivo. El futuro de Portugal Telecom es ahora incierto, ya que se enfrenta a una opa lanzada por el grupo Sonae. Y Alierta, por su parte, ha insistido en que, sea cual sea el futuro dueño de la portuguesa, Telefónica está "claramente" interesada en obtenerlo, pero siempre pagando "el precio correcto". Granadeiro explicaba a la citada publicación que no podrá aceptar "nunca" la idea "absurda" de que Telefónica es el "comprador natural" y que su compañía es un candidato "tan inevitable y natural", o más, que la española para controlar Vivo. Señaló que, teniendo en cuenta la tendencia en telecomunicaciones a transmitir contenidos entre las distintas compañías de los grandes grupos, "los contenidos son mucho más próximos entre Brasil y Portugal que entre Brasil y España", lo que convertiría a su compañía en idónea para adquirir Vivo. Pero Alierta no tiene ninguna intención de deshacerse de su parte, y en varias ocasiones ha manifestado que su participación es estratégica y que no renunciará a su presencia en Brasil. Granadeiro recalcó que PT también tiene "una estrategia" para ese país, "un mercado de crecimiento", y que su objetivo es "relanzar" a Vivo. "Un día resolveremos el problema, pero no acepto que el 50 por ciento de PT en Vivo valga menos desde ningún punto de vista que el 50 por ciento que tiene Telefónica", advirtió. Y añadió que ambas empresas no están "obligadas a ser amigos ni a tener los mismos objetivos estratégicos", sólo a entenderse "sobre la conducción del negocio". "Ése es el único punto de contacto, y diría también que de entendimiento". Telefónica rehusó ayer comentar estas declaraciones.