El grupo galo coloca la mayoría de su 7,6% a inversores foráneos por 224 millonesLa escalada en bolsa de Bankinter permite a Crédit Agricole sellar su singladura en el capital sin más apuros. La anunciada colocación del 7,6 por ciento que aún conservaba en la entidad presidida por Pedro Guerrero le reportó ayer 224 millones de euros en ingresos, de los que 106 millones son plusvalías. A dicho rédito, el grupo galo suma otros 37 millones de euros en ganancias por distintas desinversiones efectuadas en los meses de julio y agosto, que no habían transcendido, y de las que Crédit Agricole rendió ayer cuenta a los supervisores de Francia. El resultado es favorable porque Crédit Agricole había destinado más de 1.000 millones a sanear la participación en dotaciones progresivas desde el estallido de la crisis en Grecia. Una prevención que le permite desinvertir hoy con rentas, aun cuando adquirió la participación a precios muy superiores. Hace seis años pagó 11 euros por título. Alta afluencia de compradores Su salida total del capital ha sido casi tan inesperada y rauda como fue la irrupción en 2007, aun cuando inició el repliegue progresivo en 2012. La apetencia por bankínteres atrajo el interés de más de medio centenar de inversores institucionales (fondos de inversión, de pensiones, soberanos...) refirieron fuentes del mercado. Crédit Agricole y UBS colocaron el 7,6 por ciento del banco a 3,39 euros por título de forma muy distribuida entre inversores, mayoritariamente extranjeros. La operación arroja para el grupo francés mejor resultado que cuando se desprendió del 5,2 por ciento en enero, aun cuando la ha materializado con el valor subiendo en bolsa. Ha colocado 66,2 millones de acciones frente a los 29,3 millones de títulos vendidos entonces y, pese a sacar el doble de papel al mercado, ofreció un descuento del 2,7 por ciento, inferior al 3,4 por ciento que tuvo que aplicar en la otra ocasión. Reafirma el plan de negocio Bankinter valoró de forma positiva la rapidez de la operación, en tanto que muestra el elevado apetito inversor en el valor y las expectivas en la entidad. Fuentes de la entidad financiera reiteraron su decisión de seguir "en la senda de crecimiento, centrado en su plan de negocio y foco estratégico en la banca privada, de empresas y seguros". Crédit Agricole sale del capital pero conserva 1,13 millones de obligaciones necesariamente convertibles en hasta 17,74 acciones del banco (algo más del 2 por ciento del capital). Se ha comprometido a no enajenarlas hasta finales de 2013. A partir de ahí, se le abre la opción de transferir los bonos, ir al canje por acciones y retornar al capital o hacerlo para la posterior desinversión. Atrás queda su anhelo de alcanzar el 30 por ciento de Bankinter y lanzar negocios conjuntos con el que entró en el capital. Quería replicar el modelo lanzado en mercados como Grecia, pero su sorpresiva irrupción suscitó fuertes reticencias en el mayor accionista de Bankinter. Su expresidente Jaime Botín libró una pugna accionarial con el galo durante años. A finales de 2010, superó su cuota en el capital y hoy tiene el 23,8 por ciento.