El Gobierno chileno dio a entender ayer que no intervendrá en el conflicto que protagoniza la aerolínea chilena LAN con el Ejecutivo argentino. "Lo que hacemos nosotros, como país, es mantener una regla igual para todos los actores de la economía. Creemos que esto es un principio fundamental para el crecimiento de los países e igualdad de oportunidades tanto para empresas nacionales como extranjera", asegúro el ministro chileno de Economía, Fomento y Turismo, Félix de Vicente. El conflicto comenzó el martes pasado cuando el Organismo Regulador del Sistema Nacional de Aeropuertos (Orsna) de Argentina le dio un plazo de 10 días a LAN para desalojar el hangar que ocupa en el céntrico aeropuerto bonaerense de Aeroparque. Los trabajadores aseguran que de hacerse efectivo el desalojo, cerca de 1.500 trabajadores quedarían cesantes. Ayer, el responsable del organismo regulador argentino, Gustavo Lipovich, avisó que la aerolínea chilena tiene de tiempo hasta el viernes para abandonar voluntariamente el hangar. "No queremos echar a LAN, pero sí que abandone este lugar para seguir las obras", dijo.