El comité de empresa y la dirección de Metales Extruidos, dedicada a la fabricación de piezas de aluminio, han llegado a un acuerdo para aplicar un ERE que contempla dos suspensiones de empleo y la reducción de jornada de 26 trabajadores de la planta que tiene en Valladolid. En un primer momento, la compañía llegó a plantear la reducción de la jornada laboral a 30 trabajadores y extinguir el vínculo contractual a otros ocho. La empresa también quería iniciar esta actuación entre el 1 de agosto y el 31 de octubre, aunque finalmente se ha retrasado su puesta en marcha un mes. Se respetará el descanso vacacional de agosto, entrará en vigor el 1 de septiembre y su finalización será el 30 de noviembre, según informa CCOO. De los 26 empleados afectados por la reducción laboral, 22 de ellos tendrán una reducción temporal de actividad del 20 por ciento, mientras que los cuatro restantes sufrirán un descenso de carga de trabajo del 40 por ciento. Esta actuación tiene el consiguiente descenso de salario en los trabajadores afectados. La primera reunión entre los sindicatos y la empresa se produjo el pasado 3 de julio, y la segunda, que sirvió para acercar posturas, dos días después. Con todo, todavía hay puntos de discrepancia, según el sindicato. En la negociación se ha conseguido que la empresa complemente el salario de los afectados por el ERE, que cobrarían el 70 por ciento de su salario bruto de la Seguridad Social. La empresa arrastra problemas económicos desde hace tiempo. De hecho, durante los últimos meses se ha producido un retraso en los pagos de las nóminas que ha hecho que algunos trabajadores cobren más allá del día 20 del mes.