"El banco requería unos ajustes de 455.000 millones de pesetas", dice la sentenciaMADRID. El Tribunal Supremo ha vuelto a dar un varapalo judicial a Mario Conde. A pocos meses de que le sea concedida la libertad condicional, el ex banquero recibió ayer la noticia de que la Sala de lo Contencioso-Administrativo del alto tribunal ha desestimado el recurso contra la decisión que tomó el Banco de España en diciembre de 1993 de intervenir la entidad y sustituir el Consejo de Administración. Este recurso era uno de los últimos cartuchos que les quedaban a los ex directivos de Banesto ante la justicia. Los recurrentes son algunos de los antiguos consejeros de la entidad, apartados casi todos del mundo financiero desde aquella intervención: además de Conde, Arturo Romaní y Rafael Pérez Escolar (ambos condenados junto a Conde), José Luis de Oriol e Ybarra, Vicente Figaredo, Enrique Lasarte, César de la Mora, Antonio Sáez de Montagut, los herederos de Ricardo Gómez-Acebo y Ramiro Núñez.IndefensiónEn los recursos, alegaban motivos como "vulneración de los derechos de prueba", "indefensión", "infracción de la Ley de Disciplina de las Entidades de Crédito" y una "falta de expediente disciplinario cuando se adoptó el acuerdo". El recurso de Rafael Pérez Escolar era especialmente duro, pues cuestionaba toda la intervención y alegaba que "no hay modo de contrastar con hechos contables la bondad de los cálculos y cifras de la inspección del Banco de España".Pero el Supremo es rotundo y desmonta uno a uno los razonamientos de los recurrentes. La sentencia afirma que tanto la intervención del banco como la sustitución del consejo era imprescindible pues "se corría peligro de inestabilidad, iliquidez o insolvencia, con el daño que eso supone para los depositantes y acreedores de la entidad".El Supremo afirma que en Banesto existía "un déficit de fondos especiales y unos activos ficticios cifrados en 341.076 millones de pesetas". Además, justifica la medida por los importantes saneamientos pendientes, ya que el banco "requería unos ajustes al menos de 455.000 millones de pesetas".