Las ventas de deuda alemana permiten al diferencial español bajar a 526 puntosPor fin un respiro, aunque pequeño y no el más deseado. Respiro, porque el diferencial del bono español a 10 años con el alemán retrocedió hasta los 526 puntos básicos, dos menos que en la jornada del martes, después de haber marcado máximos del día en 532 puntos básicos (el máximo histórico del diferencial se encuentra en 538 puntos). Así se rompía una racha de tres sesiones seguidas al alza en las que la prima de riesgo subió un 12,1 por ciento. No obstante, este estrechamiento entre los rendimientos del bono español y su par alemán no se produjeron por compras de los primeros -la situación más deseada, pues indicaría que los inversores están recuperando confianza en el Reino de España-, sino por ventas del bund, que ayer volvió a comportarse como un activo de riesgo y no un lugar en el que refugiarse. El rendimiento del papel alemán con vencimiento a diez años escaló hasta el 1,488 por ciento, máximos de un mes, en un día en el que el Tesoro alemán acudió a financiarse a los mercados (ver página 13). Paralelamente, ayer también volvieron a repetirse movimientos de venta en la deuda española, provocando que el bono a diez años renovase los máximos históricos batidos tan sólo un día antes al cerrar la sesión con una rentabilidad del 6,75 por ciento (en algún punto de la sesión del martes llegó a cotizar en el 6,83 por ciento). De ser efectivo el préstamo de 100.000 millones a la banca española, la ratio de deuda sobre PIB se dispararía al 90 por ciento. El único dato positivo para España ayer fue el relajamiento de sus seguros contra impago (CDS: retrocedieron siete puntos desde máximos históricos, hasta 599 puntos. Italia imita a España Similares movimientos se pudo ver en el comportamiento de la deuda italiana y de su diferencial con la alemana, en un día en el que el Estado italiano también ejecutaba una subasta de letras con vencimiento a un año. La prima de riesgo transalpina rompía cuatro sesiones consecutivas de alzas, en las que se disparó un 9 por ciento, al retroceder hasta los 474 puntos básicos al cierre de la sesión, también dos menos que al cierre del martes. La deuda senior italiana también registró ventas, de ahí que su rentabilidad avanzase hasta el 6,216 por ciento. La única diferencia con España es que el máximo del bono italiano se sitúa en el 7,26 por ciento.