El Fondo pide ayudas públicas y un 'banco malo' para limpiar los activos tóxicosEl Fondo Monetario Internacional hizo público ayer su diagnóstico sobre el sector financiero de nuestro país tras realizar una exhaustiva radiografía de la industria durante sus visitas en febrero y abril a España. El resultado no tuvo desperdicio. La institución capitaneada por Christine Lagarde pidió el urgente saneamiento de Bankia, ya que la entidad capitaneada por Rodrigo Rato supone un riesgo para la estabilidad financiera del país. En este sentido, el Fondo, a través de su Programa de Asesoramiento al Sector Financiero (FSAP, por sus siglas en inglés), destaca que el sector bancario español ha sufrido "una crisis sin precedentes" y mientras reconoció que las grandes entidades (en clara referencia al Banco Santander y el BBVA) están suficientemente capitalizadas, para enfrentar "un posible deterioro de las condiciones económicas", las cajas todavía suponen el talón de Aquiles del sistema. Así, el FMI puso de manifiesto que, en estos momentos, diez entidades, que en su mayoría han necesitado de financiación pública para sobrevivir, "son vulnerables". Entre ellas, destacó el documento, cinco han sido abosorbidas o fusionadas, tres están en proceso de ser subastadas al mejor postor y dos están a la espera de que el Banco de España apruebe sus planes de restructuración. Curiosamente, y de forma implícita pero muy clara, el FMI hizo una importante recomendación a Bankia. "Para preservar la estabilidad financiera, resulta crítico que esos bancos (en referencia a las entidades vulnerables), sobre todo el mayor de ellos, adopten medidas prontas y decisivas para reforzar sus balances y mejorar su gobernanza". Un importante revés para la compañía que preside Rodrigo Rato. De hecho, el informe destacó que el saneamiento "es esencial para evitar cualquier impacto adverso sobre los bancos más sólidos", es decir, un contagio que acabe por hacer daño a las entidades hasta ahora consideradas estables. El plan de la entidad Fuentes de Bankia salieron al paso de la recomendación y recordaron que tienen en marcha un plan para fortalecerse, que ha sido aprobado por el Gobierno. Además destacaron que ya han cumplido con las exigencias de capital reclamadas por Europa. Al hilo de la limpieza que Bankia y otros bancos deben llevar a cabo de forma inmediata, la institución insinuó que el gobierno deberá ayudar con fondos públicos al sector para garantizar una completa reestructuración de la banca. Los funcionarios del Fondo reconocen que los costes de resolución de las medidas impuestas hasta ahora podrían ser "demasiado elevadas" para que la industria a través del Fondo de Garantía de Depósitos (FGD). Por ello, el FMI aseguró que podría "ser necesario un mayor recurso a la financiación pública, con el fin de preservar la estabilidad financiera y evitar un excesivo desapalancamiento". En este sentido, el Ejecutivo de Mariano Rajoy, a través del Ministro de Economía, Luis de Guindos, dejó claro la semana pasada que el Gobierno no aportaría más ayudas públicas a la banca. También aconseja la creación del banco malo que está en estudio por parte del Ejecutivo y el supervisor. La institución internacional reseña que entre las posibles opciones existentes para abordar de manera eficaz el problema es separar los activos tóxicos con "la creación de empresas públicas o privadas" especializadas en la gestión. Otra de las propuestas que baraja el FMI es mantener dichos activos en las cuentas de los bancos, eso sí, de cualquier modo pide "un diagnóstico completo de los activos deteriorados", algo que será muy útil para orientar de forma correcta la estrategia del sistema bancario.