La compañía eleva su cartera de clientes en cerca de 80.000 y crece el 42% en multirriesgosMADRID. Mutua Madrileña no sólo es una compañía que vende seguros de automóvil. La compañía que preside Ignacio Garralda lo pone de manifiesto a través de las cifras que arrojan otros ramos de la actividad al margen del de automóvil y, en este sentido, cobra especial relevancia el de hogar. Según los datos consultados por este periódico, la compañía con sede en el madrileño Paseo de la Castellana ha triplicado el número de pólizas de hogar en sólo dos años. En concreto, la compañía ha logrado sumar cerca de 80.000 nuevos clientes al pasar de las 43.000 pólizas con las que cerró el ejercicio de 2009 a las 120.000 que tiene en la cartera tras echar el cierre al balance del pasado ejercicio. ¿Cuáles son las claves de esas cifras? Desde la compañía explican que se debe tanto a una mayor nueva producción como, especialmente,a un porcentaje de bajas muy reducido. De hecho, la compañía tiene una tasa de fidelidad de las más altas del sector (el 94 por ciento frente al 84 por ciento de media en el sector). La facturación de esta división, Mutua Madrileña Hogar, superó los 23 millones de euros al cierre de 2011. La actividad en ese ramo mantuvo altas tasas de crecimiento, tanto en la captación de nuevos asegurados como en la cartera resultante a final de año que presenta un crecimiento del 44 por ciento respecto a 2010. Pero una de las cifras que registró una evolución más espectacular fue la de multirriesgos. En el año 2011, Mutua Madrileña registró un crecimiento muy superior al mercado, un 42 por ciento frente al 3,4 por ciento del resto del sector. Ante la atonía del negocio del seguro de autos, el ramo de hogar ha mantenido crecimientos positivos en todo el sector. Aunque viene mostrando una desaceleración sostenida de las primas desde 2002, hay previsiones de cambio de tendencia para los próximos años. La siniestralidad creciente en este ramo provoca un estrechamiento de los márgenes de un negocio que sigue muy influido por la crisis y el mercado hipotecario.