El runrún empieza a tomar consistencia y esa fuerza no cesará hasta que exista un desmentido categórico y convincente. Los analistas comienzan a anticipar una posible compra de Nokia por parte de Microsoft. De esa forma, la alianza empresarial de ambos gigantes se convertiría en algo mucho más íntimo. Si el fabricante de móviles y el del 'software' son poco menos que uña y carne, antes de fin de año podrían convertirse en la misma cosa. El globo sonda lo ha lanzado Eldar Murtazin, analista que debe saber de lo que habla, ya que meses atrás anticipó que Nokia caería rendido ante la plataforma Windows Phone. Para redondear la jugada, el experto suelta una cifra mareante: 32.000 millones de dólares. El dinero no parece un problema para la firma de Bill Gates, cuya tesorería apenas se resintió tras la reciente compra de Skype por 8.500 millones. Además, la cotización del fabricante ha caído el 7 por ciento en los tres últimos meses, por lo que la adquisición podría resultar más barata cuanto más tiempo transcurra. En el caso de que Microsoft hinque el diente a Nokia, llevarían razón aquellos que comparaban al nuevo presidente de la multinacional finlandesa, Stephen Elop, como el caballo de Troya que escondía a todo el ejército de Redmond. Desde que el exdirectivo de Microsoft tomó las riendas de la multinacional finlandesa, con aquel email incendiario que comparaba Nokia con una plataforma petrolífera en llamas, los acontecimientos se han ido sucediendo a toda velocidad. Primero fue el acuerdo estratégico con Microsoft, después la compra de Skype y la integración en los móviles Nokia, poco más tarde el traslado de los 3.000 empleados que trabajan con Symbian con destino a Accenture y por último, la puntilla a la tienda 'online' Ovi. Los grandes males de Nokia, con una preocupante pérdida de atractivo comercial en el mercado de móviles y de plataformas, exigían grandes remedios. Google y Apple estaban laminando el futuro de Nokia y, en plena caída libre, el fabricante encontró a Microsoft el salvador que pedían a gritos parte de los accionistas. Ante el presunto interés de Microsoft por comprar Nokia, algunos observadores se preguntan el motivo de semejante esfuerzo, una vez que ha quedado demostrado que Nokia viene a ser como una extensión más del negocio de los padres de Windows. ¿Para qué casarse si de novios se pueden obtener las mismas ventajas? La patronal de las 'teles', ¿en la picota? Las cinco cadenas nacionales privadas miembros de Uteca, Telecinco (más Cuatro), Antena 3, La Sexta, Net TV y Veo TV, se reúnen hoy para tratar de dar carpetazo de una vez por todas al problema de la elección de un nuevo presidente. Por ahora, el único candidato manifiesto es José Miguel Contreras, consejero delegado de La Sexta, un nombre que no hace ninguna gracia en Telecinco y cuyo nombramiento lleva varias semanas bloqueando. Pero el encuentro de mañana tendrá que poner negro sobre y blanco de una vez por todas. Si el apoyo de la mayoría de los miembros de Uteca es para Contreras, según fuentes del sector, Telecinco, en guerra con la cadena de Mediapro, podría incluso llegar a dejar la patronal como protesta. Paolo Vasile, el consejero delegado de Telecinco, ya ha manifestado en varias ocasiones que la presidencia debería atender al orden de ingreso en Uteca, por lo que el puesto tendría que corresponder a alguna de las dos televisiones más pequeñas, la de Unidad Editorial (Veo) o la del grupo Vocento (Net). Además, Telecinco, que ha tenido varios encontronazos con La Sexta, los cuales incluso han acabado en los tribunales, no ve con buenos ojos que con quien está en permanente lucha pueda sentarse en la presidencia de la patronal que tiene que defender sus intereses. El runrún empieza a tomar consistencia y esa fuerza no cesará hasta que exista un desmentido categórico y convincente. Los analistas comienzan a anticipar una posible compra de Nokia por parte de Microsoft. De esa forma, la alianza empresarial de ambos gigantes se convertiría en algo mucho más íntimo. Si el fabricante de móviles y el del 'software' son poco menos que uña y carne, antes de fin de año podrían convertirse en la misma cosa. El globo sonda lo ha lanzado Eldar Murtazin, analista que debe saber de lo que habla, ya que meses atrás anticipó que Nokia caería rendido ante la plataforma Windows Phone. Para redondear la jugada, el experto suelta una cifra mareante: 32.000 millones de dólares. El dinero no parece un problema para la firma de Bill Gates, cuya tesorería apenas se resintió tras la reciente compra de Skype por 8.500 millones. Además, la cotización del fabricante ha caído el 7 por ciento en los tres últimos meses, por lo que la adquisición podría resultar más barata cuanto más tiempo transcurra. En el caso de que Microsoft hinque el diente a Nokia, llevarían razón aquellos que comparaban al nuevo presidente de la multinacional finlandesa, Stephen Elop, como el caballo de Troya que escondía a todo el ejército de Redmond. Desde que el exdirectivo de Microsoft tomó las riendas de la multinacional finlandesa, con aquel email incendiario que comparaba Nokia con una plataforma petrolífera en llamas, los acontecimientos se han ido sucediendo a toda velocidad. Primero fue el acuerdo estratégico con Microsoft, después la compra de Skype y la integración en los móviles Nokia, poco más tarde el traslado de los 3.000 empleados que trabajan con Symbian con destino a Accenture y por último, la puntilla a la tienda 'online' Ovi. Los grandes males de Nokia, con una preocupante pérdida de atractivo comercial en el mercado de móviles y de plataformas, exigían grandes remedios. Google y Apple estaban laminando el futuro de Nokia y, en plena caída libre, el fabricante encontró a Microsoft el salvador que pedían a gritos parte de los accionistas. Ante el presunto interés de Microsoft por comprar Nokia, algunos observadores se preguntan el motivo de semejante esfuerzo, una vez que ha quedado demostrado que Nokia viene a ser como una extensión más del negocio de los padres de Windows. ¿Para qué casarse si de novios se pueden obtener las mismas ventajas? La patronal de las 'teles', ¿en la picota? Las cinco cadenas nacionales privadas miembros de Uteca, Telecinco (más Cuatro), Antena 3, La Sexta, Net TV y Veo TV, se reúnen hoy para tratar de dar carpetazo de una vez por todas al problema de la elección de un nuevo presidente. Por ahora, el único candidato manifiesto es José Miguel Contreras, consejero delegado de La Sexta, un nombre que no hace ninguna gracia en Telecinco y cuyo nombramiento lleva varias semanas bloqueando. Pero el encuentro de mañana tendrá que poner negro sobre y blanco de una vez por todas. Si el apoyo de la mayoría de los miembros de Uteca es para Contreras, según fuentes del sector, Telecinco, en guerra con la cadena de Mediapro, podría incluso llegar a dejar la patronal como protesta. Paolo Vasile, el consejero delegado de Telecinco, ya ha manifestado en varias ocasiones que la presidencia debería atender al orden de ingreso en Uteca, por lo que el puesto tendría que corresponder a alguna de las dos televisiones más pequeñas, la de Unidad Editorial (Veo) o la del grupo Vocento (Net). Además, Telecinco, que ha tenido varios encontronazos con La Sexta, los cuales incluso han acabado en los tribunales, no ve con buenos ojos que con quien está en permanente lucha pueda sentarse en la presidencia de la patronal que tiene que defender sus intereses.