Los trabajadores dan 12 días a la empresa para volver a negociar o los parones seguiránMADRID. En plena Operación Retorno tres días han sido más que suficientes para que alrededor de 45.000 viajeros hayan padecido las consecuencias de la huelga que sacude implacable el servicio de Auto Res. Según han aclarado fuentes sindicales a Ep, un día de fin de semana la empresa puede llegar a trasladar a entre 15.000 y 20.000 personas, hecho que se habría acentuado por coincidir las movilizaciones con la vuelta de las vacaciones. Así, con los paros de los días 29, 31 y 1 de septiembre ya son 39 las jornadas de huelga emprendidas por los trabajadores desde el pasado mes de abril, cuando la empresa despidió a 14 trabajadores del personal auxiliar y de taquilla y anunció un recorte salarial del 5 por ciento. Los trabajadores, que critican a la empresa por su opacidad al no hacer público el número de afectados y la consecuencia de estos parones, también cargan contra el Ministerio de Fomento por no haber intercedido en el conflicto. "Con los controladores sí que medió y con nosotros, que no queremos que nos suban el sueldo sino simplemente no echen a nadie más, nada de nada". De esta guisa se celebró ayer además la asamblea de los trabajadores para decidir si se continúa adelante con las movilizaciones. Finalmente, los sindicatos han votado por conceder un margen de confianza a la empresa de casi dos semanas para acercar posiciones antes de volver a la huelga. "El lunes notificaremos por escrito a la dirección que se avenga a negociar. Si no es así, en el plazo de 10 o 12 días convocaremos nuevas movilizaciones para todos los fines de semana", las cuales podrían extenderse en el tiempo hasta el próximo mes de enero "o más", aclaró a Efe el portavoz de UGT en la empresa, Francisco Morales. Los contactos entre Auto Res y sus empleados se prolongaron hasta el pasado mes de junio cuando, cansados de no lograr ningún avance, se dieron por rotas las negociaciones. El pasado 16 de agosto los sindicatos pidieron al Ministerio de Fomento y a la Dirección General de Transporte por Carretera que buscasen una solución al conflicto.