El Banco de España les permitirá usar una porción de los 30.000 millones que tienen 'congelados' para insolvencias santander. El Banco de España acaba de dar un balón de oxígeno a las entidades financieras. Su subgobernador, José Viñals, sorprendió ayer a todos -incluida la banca, que no lo sabía- al anunciar que rebajará las provisiones para insolvencias crediticias, lo que en la práctica supone que bancos y cajas podrán usar buena parte de los más de 30.000 millones de euros que tienen congelados para su negocio puro bancario, incluidas compras, y que suponen una desventaja con sus competidores europeos. Viñals puso el broche de oro a unas jornadas en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP) de Santander, organizadas por la APIE, con el anuncio de que el Banco de España está estudiando reformar la normativa que regula las provisiones para insolvencias crediticias que debe realizar la banca, que permitirá a partir de 2008 a las entidades más grandes y con modelos de medición del riesgo más avanzados calcular sus propias necesidades de dotaciones.Adaptar el sistema El subgobernador del Banco de España afirmó que esta reforma "persigue adaptar el sistema a las circunstancias concretas de cada entidad".Por el momento, el Banco de España no ha cifrado el número de entidades que se acogerán a este sistema como tampoco ha cifrado el ahorro que puede suponer, aunque dijo que no será espectacular. Sí dijo que había más de 30.000 millones en provisiones para insolvencias y que afectará a las "más grandes". Con este cambio desaparecerán las dos provisiones que existen actualmente: genéricas y específicas, y quedarán en "provisiones para insolvencias", como sucede en los países de nuestro entorno. Además, Viñals también se refirió al repunte de la morosidad de los bancos y cajas, y concluyó que no hay diferencias entre ambos ya que "la calidad es la misma".También hizo referencia a que el Banco de España "no aspira a supervisar las reunificadoras de deuda". Respecto a las hipotecas a 50 años, afirmó que "si bien son hipotecas tremendamente largas, de lo que hay que asegurarse es de que las entidades que las conceden cuenten con las garantías suficientes". Viñals se decantó además por cambiar los modelos supervisores en España hacia un sistema de dos picos y explicó que el Banco de España en ningún momento se ha planteado limitar los billetes de 500 euros, pese a su proliferación.