Sin subvenciones de las administraciones, es el único de Castilla y León que se tiene en pievalladolid. La magia del teatro corre por las venas de Luis San Juan, fundador de la compañía teatral MayLui. Más de setenta años lleva recorriendo los pueblos de Castilla y León sin descanso acompañados de un caradura con suerte, el calzonazos, la malquerida o dos paletos en Madrid.Sin embargo, no son buenos tiempos para la lírica, el teatro MayLui no recibe ninguna subvención y San Juan se queja: "Me tengo que pelear con los ayuntamientos para que me cedan el terreno a un precio mínimo".Quizá sea por esta falta de ayudas por las que este grupo teatral, compuesto por ocho personas, sea el último que recorre las calles castellanas. Cada día un escenario, en un lugar diferente, pero, como siempre, a las diez y cuarto de la noche ofrecen una obra diferente, y pueden estar "hasta quince días sin repetir" afirma el empresario. Antes hacían dos funciones diarias y los domingos incluso una matinal, "pero en estos tiempos que corren con la sesión de noche es suficiente". Con el buen tiempo el negocio aumenta y, gracias a esto, el teatro todavía sigue en pie y es que "si no me subiera a un escenario cada día me moriría", aclara el fundador.